Afirma Jhony Villacís, estudiante de quinto semestre de la Politécnica Salesiana, Campus Sur de Quito, y miembro del club de robótica.
Destaca que Campus Party fue “tecnología, educación y entretenimiento” donde 2000 campuseros provenientes de todas las regiones y universidades del país pudieron vivir una experiencia única, lograr amigos, establecer relaciones profesionales y conocer los avances de la tecnología digital.
Villacís nos cuenta que en el club de robótica, al que pertenece, desarrolló un pequeño robot con sensores infrarojos, los cuales le permiten seguir líneas de color negro sobre un panel blanco. “La utilización de los dos colores es importante, porque mientras el negro absorbe la luz, el color blanco la refleja, y así el robot sabe qué dirección tomar”, nos explicó el joven campusero.
Este tipo de proyectos, djo, puede servir para solucionar el problema de las personas en silla de ruedas que no pueden utilizar sus manos para desplazarse de un lugar a otro. Si se instala un sistema como éste y marcamos en su entorno o lugar de residencia las líneas que conecten diferentes áreas, la persona a través de un pequeño panel de control puede movilizarse sin necesidad de realizar ningún esfuerzo físico, manifestó.
Al igual que todos los chicos que expusieron sus proyectos en el Campus Party, Jhony necesita apoyo e inversión, ya que los estudios ya están realizados, pero los motores que se utilizarían en las sillas de ruedas son caros.
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