El Sistema Nacional de Nivelación y Admisión (SNNA) implementó el proyecto Política de Cuotas desde el 2014, a través de un plan piloto, con el objetivo de efectivizar una política de acción afirmativa para dar cumplimiento a lo dispuesto en la Ley Orgánica de Educación Superior (LOES) donde se señala que las instituciones de educación superior auto y cofinanciadas deben realizar de manera obligatoria políticas a favor de grupos discriminados.
Según la SENESCYT, el proyecto se establece con la convicción de que la inclusión es un polo complementario que refuerza la calidad, la democracia y el buen vivir en la educación. Así, enfatiza la SENESCYT, se ha logrado beneficiar con becas de colegiatura completa en instituciones privadas a estudiantes pertenecientes a grupos con vulnerabilidad social y económica, gracias a convenios y esfuerzos conjuntos con múltiples universidades privadas entre ellas: Universidad Politécnica Salesiana, Universidad Tecnológica Equinoccial, Universidad Metropolitana, Universidad Internacional SEK, Universidad San Gregorio de Portoviejo y Universidad de las Américas (UDLA). Esta política ha sido cumplida paulatinamente por las demás universidades, anota la SENESCYT.
Las becas de Política de Cuotas, agrega, no se otorgan bajo solicitud particular, la selección de esta población se realiza a través de un algoritmo sobre la base total de aspirantes registrados en el sistema y habilitados para postular en cada período académico, que se encuentren dentro de los términos meritocráticos de la asignación de cupos, para el segundo semestre de 2016 también se han considerado la residencia en las provincias de Manabí y Esmeraldas afectadas por el terremoto como criterio dentro el algoritmo.
A través de esta política de acción afirmativa, enfatiza la SENESCYT, se ha garantizado el acceso de la educación superior a aproximadamente 16.414 personas, entre indígenas, afroecuatorianos, montubios, personas con algún tipo de discapacidad, beneficiarios del Bono de Desarrollo Humano (BDH), condición de refugiado con carnet y aquellos que pertenecen a los quintiles socioeconómicos más bajos.
Adicionalmente, dice la SENESCYT, desde la implementación de este proyecto cientos de actores sociales del sistema educativo universitario público y privado han recibido apoyo y asesoría técnica, charlas de sensibilización, talleres de accesibilidad y tutorías para seguimiento de becarios, producto de un convenio interinstitucional con el Consejo Nacional para la Igualdad de Discapacidades (CONADIS) y del seguimiento que se tiene con las universidades.
A través de iniciativas como Política de Cutas, concluye la SENESCYT, se concreta la aspiración de que la condición socioeconómica, etnia, discapacidad, lugar de residencia, entre otras, dejen de ser un impedimento para que los jóvenes ecuatorianos accedan, se mantengan y terminen exitosamente su formación académica.
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