El Instituto de Investigación en Biomedicina de la Universidad Central del Ecuador lleva desde el 31 de julio de 2017 el nombre del Dr. Rodrigo Fierro Benítez. Este reconocimiento se lo hizo en el marco de la conmemoración de los 250 años de la graduación del médico Eugenio de Santa Cruz y Espejo.
Como un homenaje a la destacada trayectoria médica y a la docencia del doctor Rodrigo Fierro Benítez la Universidad Central develó este lunes 31 de julio un retrato y puso su nombre al Instituto de Investigación en Biomedicina, ubicado en el Hospital Docente de Caderón, en el norte de Quito.
Durante su intervención el Dr. Rodrigo Fierro agradeció a la Universidad Central, que fue su casa de estudios, por este reconocimiento. «Me agradaría que éste Instituto pueda convertirse en fuente de conocimiento científico”, expresó.
El doctor Fernando Sempértgui, rector de la Universidad Central recordó con orgullo que en 1967 fue alumno del doctor Fierro en la cátedra de endocrinología.
Rodrigo Fierro Benítez, nació en Ambato, Ecuador, en 1930. Es médico y doctor en Medicina por la Universidad Central de Madrid, sus estudios de especialización en Endocrinología y Medicina Nuclear los realizó en España, Italia, Estados Unidos y Canadá. Es pionero en el Ecuador de la Endocrinología y la Medicina Nuclear, profesor-investigador del Instituto de Ciencias Nucleares de la Escuela Politécnica Nacional, fundador y titular de la Cátedra de Endocrinología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Central, colaborador del Área de Salud de la Universidad Andina Simón Bolívar, investigador extranjero del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT-USA), profesor honorario de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, profesor visitante de La Universidad de Chicago y profesor honorario de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Central del Ecuador.
Ha publicado más de un centenar de artículos en revistas científicas del país y del exterior, es autor de una decena de libros publicados en el Ecuador y coautor de numerosas publicaciones en Europa y Estados Unidos. Tiene numerosas publicaciones en Europa y Estados Unidos y ha dictado conferencias en países americanos y europeos, la ex Unión Soviética y la República Popular China. Tiene un papel protagónico en la corrección de las deficiencias alimentarias de yodo, hierro y colina. Sus investigaciones le llevaron al ensayo de interpretación histórica (la Biopatología en la historia de los pueblos andinos) y al periodismo de opinión (articulista del diario quiteño El Comercio desde 1980).
Entre los cargos más importantes que ha tenido están: Ministro de Salud Pública (1979), Presidente de la Asociación Latinoamericana de Academias Nacionales de Medicina (1995) y miembro activo, Academia de Ciencias de New York (1995). Pero también se ha hecho acreedor a premios como: “Gregorio Marañón” de la Academia Médico-Quirúrgica Española (1956), Condecoración Nacional al Mérito Educacional (1983), de Salud (1985, 2000, 2004) y Cultural (1994) de Primera Clase. Condecoración Isabel La Católica del Estado Español (1981) y Encomienda de la Orden de Isabel La Católica (1991). Premio al Mérito en Medicina Social, Instituto Benjamín Franklin de los EE.UU. (1993). Premio “Abraham Horwitz” Fundación Panamericana de la Salud y Educación (1999). Doctor Honoris Causa, Escuela Politécnica Nacional (2000). Premio Nacional “Eugenio Espejo” en Ciencias (2001). Héroe de la Salud Pública de las Américas, OPS/OMS (2002). Académico de Honor, Real Academia Nacional de Medicina de España (2003). Gran Collar San Francisco de Quito, del I. Municipio de Quito (2008).
Rodrigo Fierro es, como los grandes galenos del país, un médico integral. No se limita a curar enfermedades. Ha sido un investigador pionero cuyos trabajos no solo han beneficiado a los ecuatorianos más pobres, sobre todo a los indígenas serranos, sino que han sido una contribución de escala mundial para enfrentar el bocio con un procedimiento desarrollado por él, que ha llegado hasta las lejanas alturas del Tíbet.
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