Por: Abg. Bolívar Armijos Velasco
Presidente Conagopre Nacional
Para palpar la realidad dolorosa que vive el sector del país, vale mostrar algunas cifras e indicadores sociales, que reflejan cómo viven las personas. Iniciamos con el porcentaje de la población urbana y rural.
La pobreza por NBI a nivel rural, desde 2005 a 2014 disminuye de 84,30% a 57,80%, lo cual evidencia una mejora, pero el indicador se mantiene alto, lo cual demuestra que se debe contribuir con mayor esfuerzo y recursos a las zonas rurales. En relación con el sector urbano en el año 2014 existe una brecha de 33 %.
FUENTE: INEC 2015
La pobreza por ingresos a nivel rural, desde 2007 a 2014 disminuye de 57,96% a 41,69%. Hay una reducción significativa de la pobreza rural que para el año 2014, sin embargo sigue siendo elevada frente al nivel urbano, con una brecha de 25,39%.
FUENTE: INEC – Sexta Ronda de la Encuesta de Condiciones de Vida, 2013-2014.
El servicio de agua por red pública según los resultados de la Sexta Ronda de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) correspondiente al periodo 2013-2014 – INEC, señala que en el sector rural en el año 2014 únicamente el 46,0% de la población rural tiene este servicio, hay una brecha de 46,5% del sector rural con relación al urbano.
FUENTE: INEC- Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares Urbanos y Rurales 2011- 2012
Las viviendas sin alcantarillado representa el 44,9% a nivel nacional, en el sector urbano corresponde al 27,3% y en el sector rural al 82,4%. Entre el sector urbano y rural existe una brecha de 55,2%, por lo que es indispensable que los municipios del país, conforme al art. 137 del COOTAD actúen y cumplan las competencias de prestación de servicios públicos de agua potable, así como el alcantarillado, depuración de aguas residuales, manejo de desechos sólidos, y actividades de saneamiento ambiental, en todas sus fases. Es una obligación de los gobiernos autónomos descentralizados municipales . Cuando estos servicios se presten en las parroquias rurales se deberá coordinar con los gobiernos autónomos descentralizados parroquiales rurales.
Las cifras demuestran que los municipios no están cumpliendo con estas competencias, sin embargo reciben asignaciones presupuestarias para estas obras.
FUENTE: SIISE 2014
En el año 2014, el sector urbano registra el 3,8% de analfabetismo y en el sector rural el 10,3%, de acuerdo a la información del Sistema de Indicadores Sociales del Ecuador, SIISE, situación que muestra que se debe incentivar programas de acceso a educación.
FUENTE: INEC Encuesta urbana de empleo y desempleo-
El trabajo infantil (5 a 14 años) en el sector rural es del 6,7% frente al 0,9% en el sector urbano en el año 2014, de acuerdo a la Encuesta Urbana de Empleo y Desempleo – INEC. Existe una brecha del 5,8% con respecto al sector urbano. Esta cifra, si bien en los últimos años ha tenido una significativa disminución, todavía es alta. En el año 2006, el trabajo infantil representaba el 23,9%, lo cual refleja una diferencia de 17,2% con respecto al año 2014.
Se ha comprobado que las niñas y niños que participan en actividades económicas, en su mayoría pertenecientes a hogares de bajo nivel socioeconómico, presentan grandes brechas en su asistencia escolar en comparación con quienes no trabajan, al igual que es bajo su rendimiento y éxito escolar.
A largo plazo, las principales consecuencias del trabajo infantil confluyen en que los niños que lo realizaron, se mantienen en situación de pobreza. Es decir, el trabajo infantil es un factor de perpetuación de la pobreza.