La educación se adapta al ritmo acelerado que marca la transformación digital. Las universidades preparan nuevas metodologías aprovechando las innovaciones tecnológicas. Es la llamada transformación digital en la formación. Como el mundo cambia permanentemente a gran velocidad, los profesionales deben desde ya tener la capacidad de aprender fácilmente y adaptarse a las trasformaciones.
Hay quienes consideran que lo importante no es el título. Que Los actuales estudiantes posiblemente accedan a puestos de trabajo que no existen hoy. Desde los centros educativos intentan enfocar la formación en mejorar sus competencias y habilidades para adaptarse a esta nueva realidad.
En Europa consideran importante tener habilidades digitales en todas las áreas de estudio. El 93% de los trabajos en Europa se desarrollan con el uso de ordenadores y medios digitales. La formación digital es esencial para el acceso a los trabajos actuales y a las nuevas oportunidades de empleo que surgirán a corto plazo.
La Inteligencia Artificial ha comenzado a integrarse en el proceso de gestión y análisis de datos, o la creación de algoritmos para la aplicación de toda esa información. Esta integración es el comienzo de la convivencia de la alta tecnología con la actividad humana.
La inversión en capital humano se cualifica y se aleja de los procesos estándar de educación. La personalización del aprendizaje y la formación a medida son las claves para sacar el máximo potencial a los futuros profesionales.
La frontera entre lo local y lo global ya no existe, por lo que la formación debe adaptarse a sistemas de conexión más complejos y no obviar las situaciones lejanas. Las consecuencias del cambio climático o la escasez de recursos naturales son fenómenos sobre los que todos debemos aprender y buscar soluciones.
Alrededor de 800 universidades en el mundo tienen su propia área virtual en la que permiten el acceso a información y material de estudio. Además, cada vez más se promueven los entornos colaborativos para compartir conocimientos.
La capacidad de contactarse con el mundo también será muy importante. Además, es necesario que la universidad o el profesional construyan redes de contactos, de conocimiento, que aprovechen las redes internacionales para tener así oportunidades de participar en los desafíos que ofrece el mundo.
Internet lanza tal cantidad de información sin contrastar, que cada vez es más necesario formar profesionales que sepan analizar, contrastar y extraer conclusiones de toda la información a la que tienen acceso.
Europa toma como ejemplo las universidades americanas para crear centros más competitivos que sean líderes en la investigación y en nuevas áreas de conocimiento.
La tecnología está cambiando totalmente el modelo de educación. La educación superior requiere hacer el cambio hacia la virtualidad. La istitución que no utilice este modelo seguramente se quedará rezagada.
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