La inversión en investigación y desarrollo (I+D) es esencial, pero no suficiente por sí sola. Es necesario complementar esta inversión con la internacionalización, la movilidad de investigadores, la transferencia tecnológica y la colaboración con el sector productivo para potenciar la innovación. Las universidades contribuyen a los SNI a través de dos modelos de apoyo: el apoyo a la gobernanza y el apoyo estratégico. Estos modelos consolidan a las universidades como pilares de los SNI, maximizando su capacidad para generar conocimiento y liderar procesos de investigación en beneficio de sus países y de la región.

A pesar de su significativa contribución a la producción científica, las universidades de ALC aún enfrentan desafíos en términos de excelencia y visibilidad internacional. La cooperación en redes puede potenciar capacidades y recursos, pero la baja participación universitaria limita su impacto. Para mejorar esta situación, se recomienda aumentar la inversión en I+D, mejorar la calidad de la investigación mediante más formación doctoral, fomentar la cooperación regional entre universidades y fortalecer el rol universitario en la gobernanza de los SNI.

El contexto de estos análisis resalta la importancia de las universidades en los ecosistemas de innovación de ALC. Generan la mayor parte de las publicaciones científicas y forman talento humano avanzado, posicionándolas como el principal motor del avance científico en la región. A pesar de los retos financieros, han logrado avances significativos, como el aumento de más del 50% en el número de estudiantes de doctorado entre 2012 y 2021. El reporte se organiza en torno a tres preguntas clave: el rol de las universidades en la producción científica, su papel en los SNI y su grado de autonomía para desarrollar investigación, y su nivel de participación en redes de cooperación.

Finalmente, se proponen recomendaciones estratégicas para fortalecer el papel de las universidades en la generación de conocimiento y la promoción de la innovación. Estas incluyen aumentar la inversión en I+D, mejorar la calidad de las investigaciones, promover la cooperación regional y aumentar la participación de las universidades en la gobernanza de los SNI. Además, se sugiere realizar estudios futuros sobre la contribución de las universidades a los SNI, incluyendo análisis del impacto de la autonomía universitaria y las inversiones en investigación, para desarrollar políticas más efectivas y basadas en evidencia.

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