“ ¡Habemus syllabus! ”

Por: Dr. Juan Morales Ordóñez 

Hace pocos días en el Vaticano salió humo blanco por la chimenea diseñada para que la comunidad católica conozca a través de esa señal el acuerdo alcanzado por los Cardenales para nombrar al nuevo Papa. Siguiendo ese protocolo, uno de los altos prelados designado para ese propósito, pronunció la célebre frase en latín “Habemus Papam”.

Esta expresión forma parte ya del lenguaje coloquial de las personas en todo el mundo. Entre nosotros también y se la utiliza en diferentes espacios sociales.

Una variación de esa frase fue utilizada en una universidad cuencana por un distinguido profesor, quien luego de un trabajo arduo y complicado por sus propias dificultades para relacionarse con los sistemas informáticos, exclamó aliviado… “¡habemus syllabus!”, para expresar su contentamiento por la tarea cumplida pese a las complejidades de llenar campos y adecuarse sin errores a lo que el sistema informático le pide al docente universitario. Quienes estuvimos presentes, cuando así se expresó el colega, no pudimos sino celebrar divertidos la adecuada y precisa expresión utilizada.

Hemos ingresado, en educación superior, a un estado de cosas en el cual la planificación y el ordenamiento han adquirido decisiva importancia. Si no se cumple con lo establecido, simplemente no se puede ser ni estar.

Creo que hemos dado un paso muy importante. Nos hemos organizado y esta situación traerá resultados positivos. Ya antes se ordenaron todos los países que tienen un desarrollo social que les permite ser competitivos en el mundo global. Hemos dejado atrás un estado natural y casi bucólico, para pasar a un estado racional de hacer las cosas… ¡pero existen muchos riesgos a sortear!

En el siglo XVIII, Voltaire en su novela “El Ingenuo” ironizó sobre la racionalidad de la civilización. En el XIX Nietszche planteó que los rasgos más sobresalientes del hombre son su creatividad e imaginación y que éstos no pueden estar sometidos a la planificación y al control. Afirmó que el superhombre es aquel que deja de lado lo apolíneo-racional para estar en lo dionisíaco-irracional. En el XX, el inglés Huxley advirtió en su obra literaria sobre los peligros de la sistematización y tecnificación.

Es difícil oponerse a la planificación y al orden como mecanismos para alcanzar condiciones de vida más apropiadas para todos. Sin embargo, debemos tener cuidado para que en ese camino no perdamos lo mejor que tenemos… espontaneidad, sencillez y una visión del mundo que nos ha hecho una cultura amigable en un entorno social y natural espectacular y único.

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