Delegado del Vaticano destaca la misión pedagógica de la UNESCO

“La educación tiene una función decisiva en el fomento del lugar central que debe ocupar el ser humano y del diálogo entre las culturas”, expresó su eminencia el Secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin, en la UNESCO. El cardenal Parolin resaltó la función esencial de la educación y la enseñanza de la historia a las generaciones más jóvenes en los niveles de primaria y secundaria.

El 3 de junio, la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova, recibió en la UNESCO a su eminencia el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado de su Santidad el Papa Francisco. La Directora General y el cardenal Parolin pasaron revista a los nuevos desafíos que se plantean en todo el mundo, desde la pobreza hasta el extremismo violento.

La Directora General destacó la labor que realiza la UNESCO en apoyo de los Estados, especialmente en lo que respecta a los derechos humanos y la educación, como medio de contrarrestar la intolerancia y la xenofobia, y se refirió en particular a la trágica situación de las personas desplazadas en Siria y los países vecinos.

Subrayando los efectos a largo plazo que esa situación tendría en toda una generación de jóvenes sirios, el cardenal Parolin y la Directora General hablaron sobre los cristianos del Oriente Medio que han de hacer frente a amenazas y violencia extremista. Bokova informó al cardenal Parolin de la reciente visita a la UNESCO de su eminencia el cardenal Boutros Rai, patriarca maronita de Antioquía y de todo el Oriente.

Bokova se refirió a sus visitas a la región, especialmente al Iraq, Egipto y el Líbano, y destacó el llamamiento creciente a la moderación que había presenciado y que partía de dirigentes religiosos del mundo árabe.

Moderación es la palabra clave

Haciéndose eco de las palabras de la Directora General, el cardenal Parolin dijo que la moderación era “la palabra clave en el mundo actual, amenazado por el radicalismo”. El cardenal Parolin resaltó la función esencial de la educación y la enseñanza de la historia a las generaciones más jóvenes en los niveles de primaria y secundaria.

A este respecto, la Directora General señaló la importancia de aprender a convivir y de ampliar los conocimientos sobre el patrimonio cultural y la diversidad que comparte toda la humanidad. Se refirió a la experiencia de la UNESCO por conducto de su programa de historia general e historia regional e hizo hincapié en el papel de los docentes a la hora de transmitir mensajes de diálogo intercultural, así como en la importancia de mejorar su condición.

El cardenal Parolin y la Directora General hablaron también acerca de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 21) y de la próxima encíclica del papa Francisco sobre el cambio climático, así como de la función de la UNESCO en la promoción de la educación para el desarrollo sostenible.

Conferencia científica

La Directora General informó al cardenal Parolin de la organización por parte de la UNESCO de la conferencia científica en el mes de julio, así como de la conferencia sobre el cambio climático y las empresas, la reciente reunión de la Junta de Asesoramiento Científico en Malasia, las actividades de la UNESCO en materia de océanos y biodiversidad en cooperación con la Organización Meteorológica Mundial y el Foro de la Juventud de la UNESCO de 2015 que se celebrará en noviembre y se centrará en el cambio climático.

Refiriéndose a la labor que realiza la UNESCO en cuestiones de ética y bioética, el cardenal Parolin transmitió el mensaje de la Santa Sede de que la ciencia debería estar al servicio de los seres humanos y que los instrumentos y avances científicos deberían guiarse en todo momento por principios éticos. Recalcó igualmente que los estilos de vida y los futuros modelos de desarrollo han de tener en cuenta la enseñanza sobre la pobreza a fin de luchar contra la miseria.

“La enseñanza sobre la pobreza es importante para adoptar un nuevo enfoque del mundo que no se base únicamente en la búsqueda de beneficios, sino en la dignidad de todos los seres humanos y la solidaridad que es preciso construir”, señaló el cardenal.

Irina Bokova dio las gracias al cardenal Parolin por su visita a la UNESCO con motivo del 70º aniversario de la Organización y estuvo de acuerdo con él en que el mandato central de las Naciones Unidas consiste en trabajar en pro de la eliminación de la pobreza. La Directora General aprovechó la oportunidad para reiterar su invitación a su Santidad el Papa Francisco para que visitara la UNESCO en un futuro cercano.

“Educar hoy y mañana”

Tras esta reunión bilateral, la Directora General participó en la conferencia titulada “Educar hoy y mañana”, organizada conjuntamente por la Misión Permanente de Observación de la Santa Sede ante la UNESCO y la Congregación para la Educación Católica, bajo los auspicios de la UNESCO.

La conferencia fue inaugurada por monseñor Francesco Follo, Observador Permanente de la Santa Sede ante la UNESCO, su eminencia el cardenal Zenon Grocholewski, prefecto de la Congregación para la Educación Católica, la Directora General de la UNESCO, Irina Bokova, el Presidente de la Conferencia General de la UNESCO, Hao Ping, y el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado de su Santidad el Papa Francisco.

La Directora General recordó las palabras del Papa Juan Pablo II durante la visita que hizo a la UNESCO en 1980:“La educación consiste en posibilitar que la persona sea más persona”.

Bokova destacó el concepto visionario de la educación para la ciudadanía mundial y el carácter pluridimensional de la educación en la actualidad, que aúna la educación para la paz, los valores, el desarrollo sostenible y las competencias, en la etapa posterior al Foro Mundial sobre la Educación 2015 celebrado en Incheon (República de Corea) en el que se estableció una hoja de ruta mundial en materia de educación para los próximos años.

“No puede lograrse nada sin educación, esa es la convicción de la UNESCO”, dijo Irina Bokova.

El cardenal Secretario de Estado recordó el carácter central de la educación en la iglesia católica, y estableció un paralelismo con la misión central de la UNESCO, en la que la educación ocupa un lugar prioritario.

El cardenal Parolin afirmó que, en todos los niveles, desde la enseñanza primaria hasta la secundaria y la universidad, la educación y los educadores tienen una función decisiva que posibilita el desarrollo de una educación de múltiples identidades, a la imagen de las sociedades contemporáneas. La educación es el “acercamiento mutuo”, definido por “la gratuidad y los intereses compartidos”, dijo el cardenal Parolin, un acercamiento que tiende al “desarrollo de valores compartidos en un contexto cada vez más fragmentado y vinculado a la identidad” y que debería contribuir a colocar “al ser humano en una posición central”. En este contexto, insistió el cardenal Secretario de Estado, la enseñanza de las humanidades es un componente esencial del desarrollo del ser humano, como ciudadano pleno, desarrollando su facultad de pensamiento crítico.

Todos los oradores destacaron que es fundamental promover una educación de calidad para fomentar el respeto mutuo y el diálogo intercultural en respuesta a la globalización y los cambios sociales producidos por la revolución digital. Existe ahora una situación de emergencia en materia de educación para impulsar, mediante la educación, el reconocimiento del diálogo intercultural para el enriquecimiento mutuo.

En un mundo que se ha convertido en una “aldea global”, como señaló el Sr. Hao Ping, Presidente de la Conferencia General de la UNESCO, es importante replantearse “al hombre, su contexto y su desarrollo” y cuestionar los contenidos y los objetivos de la educación.

“Transcurridos setenta años desde el nacimiento de la UNESCO y el apoyo a la construcción de escuelas al término de la Segunda Guerra Mundial, en nombre de la moral universal y la solidaridad intelectual, resulta fundamental”, afirmó el Sr. Hao Ping, “promover una educación orientada al futuro, que sea un aprendizaje constante del diálogo pacífico entre las distintas culturas y las distintas voces”.

“Invertir en educación y cultura”, dijo el cardenal Secretario de Estado, “es la condición esencial para el desarrollo de los pueblos y, en particular, de los más vulnerables y los más desfavorecidos”.

Por último, el cardenal Parolin subrayó la misión pedagógica común con la UNESCO, orientada a nutrir la “convivencia en medio de las diferencias” a fin de contrarrestar la “cultura de oposición” y “la negación de la humanidad del otro”, dos plagas que afectan a muchas sociedades hoy en día.
EcuadorUniversitario.Com

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