Linda Guamán y Pablo Ernesto Albán forman un matrimonio de ecuatorianos que actualmente estudian en la ciudad de Sao Paulo (Brasil), con sendas becas otorgadas por la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (SENESCYT).
Pablo recuerda la fecha exacta en la que conoció a Linda, “fue un 5 de noviembre del 2005”, afirma muy sonreído y feliz. Su amistad nació en Nuevo Rocafuerte, un lugar lejano en el Oriente ecuatoriano, que se encontraba a 10 horas en lancha de la ciudad de Coca. Desde hace dos años, los esposos viven en Brasil. “Gracias a las becas de la Senescyt”, enfatiza Linda.
Pablo Albán, quiteño de 35 años, estudió medicina en la Universidad Central del Ecuador, su padre un instrumentador quirúrgico del Hospital Eugenio Espejo, le contaba sus experiencias en la sala de quirófanos en intervenciones del corazón, desde ahí Pablo supo que su vocación era ser médico cirujano cardiovascular.
Linda Guamán, tiene 29 años y es de la ciudad de Cuenca, sus estudios de pregrado como Ingeniera de Alimentos los realizó en la Universidad del Azuay. Dejó de estudair un semestre de esta carrera para realizar misiones con las Hermanas Terciarias Capuchinas, aunque su madre no estaba de acuerdo, por lo que Linda se escapó de su casa con la matrícula de ese semestre y se sumergió en la selva para ayudar a los demás, ahí asistió a Pablo en el centro de salud del poblado y, aunque no fue amor a primera vista, su relación creció a pesar de la distancia y ahora comparten juntos la experiencia de realizar sus estudios en Brasil.
Se casaron en enero del 2012 y hasta febrero de ese año, Pablo convenció a Linda de que el mejor lugar para aprender la especialización de sus sueños era Brasil, vendieron todos los regalos de boda: lavadora, cama, refrigeradora y también su auto. Con sus ahorros y sueños se radicaron en Sao Paulo. “No fue fácil estar lejos de la familia, empezar de cero, no conocíamos el idioma ni el lugar”, cuenta Linda. En ese proceso, el dinero comenzó a faltar y tenían que recurrir a sus padres. Conocieron algunas personas que fueron beneficiarias de las becas de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación, indagaron más por Internet y decidieron aplicar.
“Es increíble lo fácil del proceso, no fue necesario trasladarnos a Ecuador, la mayoría de etapas las cumplimos por Internet y nuestros padres nos ayudaron con un poder que les habíamos entregado. Realizamos las pruebas en el Consulado y luego una entrevista por Skype”, detalla Linda. “Tuvimos dificultades pero hemos logrado salir adelante”, manifiesta Pablo.
Ahora él estudia su Especialización en Cirugía Cardiovascular y Linda su Doctorado en Microbiología. Aún les queda casi dos años de estancia en Sao Paulo y esperan que su siguiente paso sea seguir preparándose y luego regresar a Ecuador para contribuir con el país y con su gente. Uno de sus mayores deseos es regresar a Nuevo Rocafuerte.
Linda y Pablo son ejemplos de constancia y de esfuerzo. Gracias a las becas que les otorga la Secretaria de Educación Superior, Ciencia, Tecnologia e Innovación pueden especializarse para contribuir con sus conocimientos al país.
SENESCYT