Por: Dr. Enrique Espinoza Freire, PhD
Universidad Técnica de Machala (Ecuador)
La globalización, como resultado del desarrollo tecnológico, es el entorno propicio para la internacionalización de la Enseñanza Superior, como respuesta a la demanda social de la formación de profesionales capaces de desempeñarse en una sociedad caracterizada por sus relaciones cada vez más complejas, globales y dinámicas. Corresponde a la universidad del siglo XXI el reto de internacionalizar la enseñanza, a través de ella se puede acceder a un mayor abanico de posibilidades de estudio, al ofertar especialidades no contempladas en los planes de estudio en las universidades nacionales y se incentiva la competitividad, en buena lid, entre las instituciones del nivel superior de educación.
El fenómeno de internacionalización de la Enseñanza Superior es un proceso complejo que requiere de la planificación e implementación de estrategias que alcancen de manera transversal a todos los procesos sustantivos (docencia, investigación y vinculación con la sociedad); tiene el propósito de internacionalizar los planes de estudio, fortalecer la actividad científico-investigativa, facilitar la movilidad de estudiantes, profesores e investigadores, diversificar las actividades académicas de las carreras y facultades y potenciar la visibilidad de la institución a nivel internacional.
Asimismo, la articulación internacional de las universidades permite crear espacios de colaboración y cooperación que propicien la sinergia entre las partes, compartir cursos de grado y postgrado, acceder a ofertas tecnológicas, participar en redes inter-universidades y otros servicios.
Para alcanzar esta condición se precisa de la acreditación, actualización y perfeccionamiento constante de los currículos y planes de estudio, atendiendo a los avances científicos, tecnológicos y pedagógico, además, de la superación sistemática del claustro como vía para garantizar la excelencia de los procesos sustantivos, aspectos que si no son bien concebidos, junto a la carencia de financiamiento y voluntad política, la existencia de estructuras burocráticas de excesivas regulaciones, la desidia por la transformación de las estructuras de gobernabilidad y la falta de flexibilidad se convierten en obstáculos que frenan este proceso.
El régimen académico de la Enseñanza Superior en nuestro país tiene entre sus objetivos el favorecimiento de la movilidad internacional de estudiantes, profesores, investigadores y profesionales para la integración de los miembros de la comunidad académica en la dinámica del conocimiento a nivel regional y mundial; no obstante y partiendo del hecho de que, la internacionalización de la universidad es una necesidad del mundo globalizado es importante reflexionar sobre lo hecho por la universidad ecuatoriana en función de aprovechar las oportunidades que brinda la internacionalización para intercambiar estudiantes, promover la colaboración científica con universidades foráneas y posicionar sus instituciones universitarias entre las más prestigiosas del orbe.
Es importante que esta mirada reflexiva esté dirigida a los siguientes aspectos: concreción de convenios académicos y proyectos científicos-investigativos de colaboración interinstitucional internacional; equidad en la accesibilidad; dominio de varias lenguas; movilidad de estudiantes, profesores, investigadores y profesionales; revisión de las políticas de ordenación académica, teniendo en cuenta los objetivos, currículos, métodos, actividades científico-investigativas, etc.; políticas de gobernabilidad universitaria a favor de cambios estructurales; políticas de financiamiento y políticas de capital humano, para así lograr una verdadera internacionalización de la Enseñanza Superior ecuatoriana.