Científicos franceses están estudiando una nueva variante de coronavirus con 46 mutaciones que ha aparecido en la región de Marsella asociada con viajes a Camerún. “Es demasiado pronto para especular sobre las características virológicas, epidemiológicas o clínicas de esta variante basada en 12 casos”, apuntan los investigadores en una prepublicación.
La nueva variante IHU identificada en Francia se ha bautizado con las siglas del Instituto Hospitalario Universitario de Marsella donde se ha estudiado. / EFE/EPA/IAN LANGSDON/Archivo
Una nueva variante de la covid ha sido identificada desde hace unas semanas por investigadores franceses en su país, derivada de otra cuyos primeros casos se habían detectado en la República del Congo el pasado mes de septiembre.
“Es demasiado pronto para especular sobre las características virológicas, epidemiológicas o clínicas de la variante IHU basada en 12 casos”, apuntan en un preprint los investigadores franceses que la han detectado
Sus investigadores publicaron a finales del mes pasado un pre-estudio, pendiente todavía de validación por sus pares, sobre esta ‘variante IHU’ llamada B.1.640.2 de la que se conoce todavía bastante poco teniendo en cuenta el limitado número de casos registrados.
12 casos identificados
“Es demasiado pronto para especular sobre las características virológicas, epidemiológicas o clínicas de esta variante basada en 12 casos”, reconocen los autores en la prepublicación.
Según este centro especializado en enfermedades infecciosas, creado y dirigido por el controvertido médico Didier Raoult, [promotor de la hidroxicloroquina como tratamiento frente a la covid a pesar de las evidencias científicas en contra], los primeros casos de IHU encontrados se dieron en la localidad de Forcalquier, en el departamento de Alpes de Alta Provenza.
Esta nueva variante presenta 46 mutaciones, todavía más que ómicron, y es una de las dos derivadas de la B.1.640 que se había localizado en septiembre en la República del Congo
Esta variante contiene 46 mutaciones, es decir todavía más que ómicron, y es una de las dos derivadas de la B.1.640 que se había localizado a finales de septiembre en la República del Congo.
Un elemento peculiar de la nueva variante es que una de sus mutaciones se asocia con un posible aumento de la transmisión del virus, pero este y otros aspectos sobre IHU se siguen investigando.