Toda mujer embarazada tiene el derecho a un parto personalizado y a recibir al recién nacido en un ambiente de afecto y respeto, considerando que el nacimiento de todo ser humano marca el desarrollo emocional, intelectual y social de este ser.
El parto es uno de los eventos naturales más importantes en la vida de una mujer, una pareja, una familia. Por ello una adecuada información a las futuras madres y los cuidados oportunos a los recién nacidos son claves para obtener buenos resultados.
El parto personalizado provee de información especializada para la madre, que, a diferencia de otras mujeres, sabrá que “cuando un bebé llora entre amamantamiento y amamantamiento no suele ser por hambre. Es una llamada de atención para recibir mejores cuidados. Pide que le tengan en brazos más a menudo”. Los bebés son vulnerables y dependientes y la atención adecuada, de sus padres, actos que sentarán las bases para un lazo seguro y satisfactorio y la construcción de vínculos afectivos posteriores, con quienes les rodean y su entorno.
La experiencia muestra que el 94% de las miradas entre la mamá y el bebé, son propiciadas por el recién nacido que está siempre buscando el refuerzo y la seguridad de verse reflejado en los ojos de su madre. Mientras toma del pecho, es importante mirar y ser mirado, porque así se establecerá una de las fórmulas más claras para reconocerse en el vínculo madre-bebé. En las primeras etapas de la lactancia, leer o ver la tele mientras nuestro bebé mama, es una distracción poco saludable para ambos, ya que el pequeño no sólo debe nutrirse de leche, sino que debe alimentarse de las miradas, los gestos y el cariño de su madre, que le harán crecer afectivamente. No hay que dar de mamar de manera mecánica, sino que hay que saber mirar y escuchar.
Las madres embarazadas y sus niños, como grupo prioritario, merecen beneficiarse de un plan de manejo durante el embarazo, así como durante y después del parto, que está encaminado a un trato más humanizado en esta importante experiencia de la vida. Primero, hay que procurar que tanto la mujer embarazada como su acompañante y familia comprendan mejor todo lo que va a ocurrir antes, durante y después del parto. Por ejemplo, un curso profiláctico de mínimo 5 clases, es un gran apoyo para la preparación física y psicológica de los involucrados. Las 4 primeras sesiones, ayudarán a la madre a manejar mejor su embarazo y a prepararse mejor para el nacimiento de su hijo, y la última, luego del nacimiento del bebé, le ayuda a manejar con mayor tranquilidad al niño y la provisión eficaz de la leche materna.
En el Hospital Vozandes Quito, a diferencia de otras casas de salud, se promueve el apego inmediato madre-bebé, pues la evidencia científica determina que este paso es fundamental para el desarrollo inmunológico, psicológico y emocional del recién nacido. El contacto piel con piel inmediato es una práctica beneficiosa tanto para el recién nacido como para la madre. Se coloca al bebé en contacto directo con su madre lo más pronto posible después de su nacimiento, incluso aún unidos por el cordón umbilical, lo cual permite el paso de la sangre de la placenta al niño como lo indican los últimos estudios, disminuyendo el riesgo de que el niño sufra anemia en sus primeros meses de vida. La lactancia materna precoz tiene múltiples ventajas tanto para la madre como para el niño. Para ello se coloca al bebé sobre el pecho de mamá, dejando que comience a lactar en el lapso de la primera hora de vida de forma espontánea, durante el tiempo que el niño precise para ello.
En relación a los exámenes indispensables para el recién nacido y que no generan dolor son: Tipo de sangre, que se lo hace en sala de partos directo del cordón umbilical por lo que no es necesario pinchar al niño. El screening cardiológico, que permite detectar un porcentaje alto de problemas cardíacos congénitos. El screening auditivo que es la prueba llamada Emisiones oto-acústicas y que sirve para determinar precozmente si el bebé escucha en forma adecuada. Otro examen que se le hace al bebé, es el tamizaje neonatal o también conocido como prueba del talón, que es un examen que se realiza a partir del cuarto día de vida, con el propósito de detectar enfermedades metabólicas en forma precoz.
Entre las primeras 12 y 24 horas de vida, al recién nacido se le administra la primera dosis de la vacuna Hepatitis B, iniciando así, el esquema de vacunación internacional y nacional. Cada uno de los pasos que se advierten, forman parte del comportamiento multidisciplinario que el Hospital Vozandes aplica con sus pacientes. En este caso, madre y recién nacido que forman parte de lo que hoy se conoce como Parto Personalizado.
Estos y otros temas son abordados en las Trigésimas Jornadas Médicas Vozandes – Ginecología y Pediatría, que se desarrollan del 12 al 16 de marzo. Expertos nacionales y extranjeros, comparten diferentes temáticas durante 5 días de importante aporte a la comunidad médica del país. Las Jornadas Médicas Vozandes, desde 1987, transmiten ideas innovadoras en lo espiritual, físico, emocional y social, en procura de influir en el contexto de la atención primaria en salud con un enfoque incluyente, masivo y multidisciplinario.
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