“Alimentar el planeta, energía para la vida”, es el concepto alrededor del cual gira la Expo Milán 2015 -que lleva casi cuatro meses de funcionamiento- que busca promover la alimentación sana, suficiente y sostenible para la humanidad, con miras a enfrentar los nuevos desafíos alimentarios. En ese sentido, Ecuador ha realizado un aporte fundamental a través de sus productos de la oferta exportable no tradicional, que incorpora temas desde el punto de vista ambiental, histórico y cultural.
Estos conceptos se traducen en tres de nuestras semillas típicas: quinua, amaranto y chía que se cultivan en la región andina, en las provincias deChimborazo, Cotopaxi, Imbabura y Bolívar, que actualmente están presentes en el pabellón ecuatoriano. Estos productos que fueron alimento de los aztecas e incas, ahora tienen a consumidores que provienen de los exigentes mercados europeos ya los identifican.
En la feria universal han tenido una buena acogida y se van posicionando. Rosario Angulo, coordinadora General de Camari, aseguró que existe una aceptación en el exterior, son demandados por sus propiedades en la parte nutricional, no contienen químicos, son saludables, y tienen un valor adicional y es que preservan el medio ambiente.
El amaranto junto con la quinua, constituyen dos de los alimentos milenarios que puede contribuir con la seguridad alimentaria del mundo, por su alto grado nutricional. El amaranto que también forma parte de la dieta de los astronautas durante las misiones espaciales, es rico en proteínas, vitaminas y minerales, fibra, grasas, entre otros. Tradicionalmente en el Ecuador conocido también como sangorache negro, sus hojas son utilizadas como ingrediente de la típica colada morada, en el Día de los Difuntos.
En la Expo Milán 2015, tanto la quinua como el amaranto se exhiben en sus variedades: natural y endulzado, con chocolate, palomitas de amaranto, galletas y harina. En el caso de la quinua con hojuelas, expandida, granola con quinua y panela, galletas, etc.
Mientras que la chía es un producto recientemente incorporado en el comercio nacional, con importantes expectativas de crecimiento en el mercado europeo. Y es que esta semilla originaria de México, es conocida por sus propiedades nutritivas, especialmente en fibra, hierro, omega 3 y vitaminas. Entre los consumidores de este bloque genera interés al constituirse en una fuente saludable.
Las condiciones de estos tres productos empatan con el concepto de la Expo Milán 2015 como una contribución del Ecuador a la seguridad alimentaria, demostrando al mundo que promueve una producción limpia, de calidad y amigable con el ambiente.