Por: Fernando Naranjo-Villacis
fnaranjo@gye.satnet.net
Otro año que pasa precipitado, dejándonos el sabor de lo vivido. Bueno para unos, malo para otros, lo cierto es que, aún respiramos, los que quedamos. Y eso, ya es bastante para celebrar la vida.
El 2013… nos trajo un nuevo Pastor Universal, que inspira a recuperar espacios en el camino de la fe cristiana. El Papa Francisco, con su ejemplo de humildad, trata de convencernos, de que aún hay esperanza para rehusar decididamente el mal y abrazar generosamente el bien.
Pero, asimismo, se nos llevó a Mandela, abanderado de la paz. Un convencido de la integración. Con respeto, justicia y dignidad. Lo despedimos como a un cercano familiar, pues su vida constituyó un valioso referente para, de manera inteligente, actuar y rescatar a un mundo caotizado, violento y deshumanizado.
Ahora nos toca a nosotros tomar la posta de uno y otro. Desarrollar ejecutorias que nos motiven a darle un sentido nuevo al optimismo para lograr una reconciliación social, dejando de lado las atrocidades, angustias y tristezas, haciendo lo posible para sanar las heridas generadas por los errores, la falta de visión y la injusticia.
Que este nuevo ciclo de vida, nos permita encontrar el sentido equilibrado del buen vivir. Con disciplina, responsabilidad y libertad. Tratando de aproximarnos al pensamiento de Martin Luther King cuando decía: “O vivimos todos juntos como hermanos o pereceremos todos juntos como idiotas”.
Tener la certeza de que hemos nacido para ser felices, para vivir y avanzar en paz, es lo que haremos realidad con trabajo y amor. Reeducando creativamente, el desarrollo humano y social que tanto necesitamos. Así, alcanzaremos una salvación colectiva. Seremos mejores personas. Sencillas, sinceras, virtuosas y sin vanidades. Debemos ser activistas de la auto educación y la autoformación, para lograr una nueva vida.
Dentro de nosotros, tenemos un mecanismo mágico que debemos descubrir. La prosperidad habita en nuestro interior. Aprendamos a querernos y valorarnos. Que el 2014 sea el año de mejores y mayores realizaciones. No regresemos a ver el pasado. La vida es, de ahora en adelante.
© 2013 EcuadorUniversitario.Com