Por: Dr. Luis Rivadeneira Játiva
Recuerdo todavía al prohombre: Ángel Polibio Chávez, rector, quien me abrió las puertas del antiguo Instituto Tecnológico Equinoccial –ITE-, en 1982. El escogió a uno de sus alumnos en la Universidad Central como maestro. En esa época, era Vicerrector Álvaro Trueba Barahona, de destacada actuación en sus períodos como rector, a partir de 1986, con quien logré hacer una amistad sincera y duradera, pero, desinteresada.
Trabajé en una etapa en que no había recursos económicos suficientes para pagar nuestros sueldos, ni siquiera éramos afiliados al IESS, lo cual se hizo realidad cuando apareció la nueva universidad, el 18 de febrero de 1986. Por designación del rector colaboré en la Comisión Pro-creación de la UTE, durante 4 años y en forma honoraria.
Colaboré, en sus inicios, de 1982 a 1984, en la extensión del ITE en Santo Domingo, que se transformó en extensión de la UTE. Viajaba a Santo Domingo para impartir clases los días viernes y los sábados y retornar a Quito en horas de la tarde.
En 1996 recibí el premio de investigación de la UTE. En el 2013, la condecoración Equinoccial, al cumplir 30 años de servicio docente. En el 2015, fui nombrado Miembro Vitalicio del Palacio del Poeta, de Quito.
He colaborado, en forma honoraria, en calidad de editor de libros, en el período de rector de Álvaro Trueba, así como también, con el rector José Julio Cevallos Gómez, con quienes edité 3 libros, a saber: una prospectiva para el Cantón Antonio Ante de la Provincia de Imbabura, Recuerdos y Reflexiones, en homenaje a los 130 años de fundación del Colegio centenario “Teodoro Gómez de la Torre” de Ibarra, como coautor, y el libro: “Alimentos para el alma”, por el día del maestro de la UTE, el 13 de abril del 2015.
He participado, eficientemente, como representante de la UTE en la Red de editores y editoriales universitarias y politécnicas del Ecuador –REUPDE- y fui nombrado Coordinador Regional, particular que informé al actual rector: Ricardo Hidalgo O., quien asumió como titular en enero de 2016.
«Lo que queda de huellas de los docentes en la UTE es lo que hemos logrado hacer por ella, en forma desinteresada». L.R.J. (17/02/2016).
He logrado escribir las siguientes obras para la Universidad Tecnológica Equinoccial:
1982 Elementos de Economía
1984 Sociología
1984 Estructura Educativa y Desarrollo
1984 Cooperativismo
1987 ¿Cómo estudiar eficientemente?
1990 Métodos y Técnicas de Investigación Social
1990 ¿Cómo hacer una monografía?
1997 ¿Cómo lograr una lectura comprensiva?
1998 Relaciones Humanas y Comunitarias
1999 Extensión a la comunidad
2005 Técnicas Pedagógicas
2006 Uso del entorno en la enseñanza de las Ciencias Sociales
2006 Didáctica de la especialidad de Ciencias Sociales
2006 Cívica
2006 Legislación Educativa
2008 Teoría Social Contemporánea
2013 Recuerdos y reflexiones –narraciones-
2014 Prospectiva del cantón Antonio Ante –propuesta-
2015 Alimentos para el alma – poemas y narraciones-
Mis mejores deseos por la superación y desarrollo de la UTE en el futuro y mi felicitación por sus 45 años de vida institucional.