Por: Dr. Luis Rivadeneira Játiva
Debemos construir un nuevo Ecuador con educación en valores, ajeno a la corrupción, porque hay tanta corrupción en el país que, los corruptos, creen que es normal apropiarse de dineros del Estado. Necesitamos de gobernantes de la talla del Presidente Interino Clemente Yerovi Indaburu que, en apenas 9 meses, dejó saneado nuestro país.
No se puede concebir un país en donde los que denuncian los actos de corrupción sean perseguidos y se llegue a ponerles grilletes, como es el caso del activista político Fernando Villavicencio, a quien, la sociedad civil organizada debe rendirle un homenaje nacional por su lucha. Un país en donde los miembros de la Comisión Nacional Anticorrupción son perseguidos y hasta se pretendió meterlos presos, por parte de un Contralor, cuyo nombre hay que olvidar, que está prófugo de la justicia.
Necesitamos un país en donde los perseguidos sean quienes deben serlo: los corruptos. Hay muchos de ellos, que creen que el dinero les ha caído del cielo. Para que suceda esto, se necesita una educación en valores que, desde la educación inicial, enseñe a los niños la importancia de ser honestos. Un país, en donde los gobernantes den ejemplo de honradez.
Un país con educación en valores es aquel en donde un ciudadano que va a un restaurante exija que le den factura y agradece por ella, porque sabe que el Estado tiene su parte y, ese dinero, pone al servicio de la sociedad. Donde las personas que están caminando en la ciudad, protejan a los niños y ancianos, cedan las veredas a las damas, ayuden a un adulto mayor a pasar de una calle a otra, tengan en su mente que si en la sociedad alguien goza de privilegios, esos son los niños. Un país en donde alguien encuentre una billetera, vea de quien es y entregue la misma a su dueño. No hay que de dar paso, jamás, a una sociedad en la cual los corruptos quieran mandar o gobernar.
Los principales valores que debemos cultivar son: la honradez, sencillez, bondad, responsabilidad, disciplina y la solidaridad. Justamente, de estos valores, necesita la sociedad ecuatoriana.
Quienes asistimos al homenaje a la Dra. Isabel Robalino, en el Teatro de la Universidad Central, por sus 100 años de vida y de lucha, nos sentimos orgullosos de ser ecuatorianos. Ella, tiene tanto prestigio, que no necesita de doctorados “honoris causa”, porque su prestigio se ha ganado por actuar con ética en la sociedad ecuatoriana.
Qué bueno saber que el ex –Presidente del Uruguay José Mujica donó el 90% de su sueldo para obras sociales. El sólo es dueño de un coche Volkswagen, mientras la chacra figura a nombre de su esposa, la cual también dona parte de su salario. Sin cuentas bancarias, sin deudas, Mujica dice dormir tranquilo. Realmente, da ganas de ir a vivir en el Uruguay, un país que tiene valores educativos como su carta de presentación al mundo. Acá da vergüenza de los corruptos del Ecuador, que hasta tienen su propia organización, construida en la década perdida.