Archivo de la etiqueta: Dr. César Paz y Miño

Lo mejor en ciencia en 2014

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

El año que está por terminar ha tenido impresionantes avances científicos que investigadores y revistas científicas coinciden en destacar como los mejores en las diversas ciencias.

En el área médica, la obtención de células madre con capacidad controlada para producir órganos vitales, ha pasado a ser una real esperanza, luego del descubrimiento de las llamadas células madre F, más rápidamente estables luego de su transformación de adultas a madre y con mejores oportunidades de ser usadas para terapia.

Igualmente, en medicina se destaca la impresora en 3D para hacer órganos, ya probada en la ‘impresión’ de un corazón para salvar la vida de un paciente de 14 meses. Esta tecnología está impactando también en la creación de prótesis o simuladores de partes del cuerpo para adiestramiento de cirujanos.

Un logro trascendental en genética artificial ha sido diseñar e integrar nuevas letras químicas de la vida en el ADN bacteriano normal, es decir nuevas bases nitrogenadas para nuevos aminoácidos. Se lograron implantar las bases X en Y a más de las conocidas A, G, C y T, lo que determinará un mejor control sobre la ingeniería genética a discreción.

Ha sido clave para combatir el ébola la secuencia completa del genoma de este virus, que evidenció 300 mutaciones nuevas que podrían ser blancos terapéuticos contra este mal, pese a que los científicos califican como desastrosa la lucha contra esta enfermedad.

El aterrizaje de la sonda Rosetta en el cometa 67P, a 6.400 millones de km de la Tierra, es un logro impresionante y los datos develarán el origen de la vida y arrojarán invalorable información sobre los cuerpos celestes.

En el área de la evolución, se destaca el descubrimiento de linajes genéticos que llevaron a los dinosaurios (reptiles) hacia aves, hace 66 millones de años.

Entre los adelantos más novedosos están los microrrobots cooperantes que pueden formar redes de trabajo y análisis; y el diseño de chips neuromórficos, es decir funcionantes casi como un cerebro con sus neuronas.

De gran relevancia es el descubrimiento de sustancias rejuvenecedoras en sangre de ratones juveniles que mejoraron la actividad cerebral de ratones viejos. Se destaca también el aparato que borra y pone recuerdos nuevos o ficticios conectado al cerebro de ratones a través de la técnica de rayos de luz llamada optogenética, que primero implantó genes de algas luminosensibles en genes de ratón para manipularlos.

Todos estos forman el conjunto de avances científicos de los que la humanidad espera recibir beneficios para mejorar su calidad de vida.

Estado de la ciencia latinoamericana

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

La revista Nature, de las más prestigiosas del mundo en ciencia, publicó un análisis del estado de la investigación de los 13 países de América Latina (AL). Las conclusiones son muy decidoras y una alerta al Ecuador.

Brasil invierte más del 1% de su PIB en investigación y concentra los dos tercios de la producción científica de la región y en número de investigadores (Ecuador destina el 0,25%). El artículo de R. V. Noorden en Nature muestra que muy por debajo de esta producción científica está Argentina, seguida por Chile, Colombia, Venezuela, Perú, Uruguay, Ecuador, Bolivia, Paraguay, Guayana Francesa, Surinam y Guyana. En conjunto todos los países de AL han crecido en producción científica, pero seguimos representando solo el 4% de la producción mundial en ciencia, relacionándola al PIB. En Argentina, 3 de cada mil trabajadores están registrados como investigadores, mientras que Brasil produce más ciencia teniendo solo 1,7 por mil; el Ecuador tiene 0,2 por mil.

En el ámbito de las colaboraciones investigativas intrarregionales, nuevamente Brasil tiene mayores colaboraciones con Argentina, Chile, Colombia, Perú y Venezuela, muy poco con Ecuador y el resto de países; parámetro medido por las publicaciones conjuntas que para los mayores colaboradores está en 3 mil y para los menores en menos de 500. El Ecuador solo tiene 10% de las publicaciones propias y el 90% son por colaboraciones, es decir por amigos. Esto significa que la percepción real de la producción científica ecuatoriana es errónea; si para el 2014 fue de 718 artículos, solo 72 serían originarios exclusivos del país. Es decir no hacemos ciencia.

Seguimos autoalabándonos del supuesto apoyo a la investigación, pero en los datos se refleja la realidad; no hay investigación de impacto, y esto corrobora el artículo de Nature, que considera que el mayor impacto científico medido por publicaciones los tienen los mismos 6 países antes anotados de AL. Ecuador tiene impacto bajo: 0,6 versus 1,8 del más alto, es decir, tenemos ciertas investigaciones de presencia internacional, pero de poco impacto mundial, panorama que no ha cambiado en los últimos 25 años.

Desde la perspectiva de un investigador, el Ecuador sigue en crisis científico-investigativa. Becas, Prometeos, nuevas universidades, financiamiento solo al sector público para el desarrollo de la investigación, no parecen surtir efecto al momento de ver las cifras. Seguimos representando el 0,01% de la producción mundial de ciencia. ¿Qué pasa en el país? Lo trataré en futuros artículos.

‘Habla serio, sexualidad sin misterio’

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

Existe polémica por el nuevo rumbo del programa Estrategia Nacional Intersectorial de Planificación Familiar y Prevención de Embarazos en Adolescentes (Enipla-2011), creado para reducir los embarazos adolescentes y no planificados, promover la educación sexual en adolescentes y niños, la planificación familiar, el ágil y gratuito acceso a métodos anticonceptivos -incluida la píldora del día después- y los derechos reproductivos. Programa emblemático del Ministerio de Salud, hasta el 26 de noviembre de 2014.

El embarazo de adolescentes se relaciona con mayor morbimortalidad materno infantil. Como médico y genetista, enfrento la falta de políticas públicas congruentes en estos temas. El manejo oficial lastimosamente evitó enfoques reales de asuntos complejos como: infecciones de transmisión sexual, mayor riesgo de malformaciones congénitas, suicidios; el embarazo no intencionado en adolescentes o por violación, que son problema de salud pública mundial. No tomar acciones preventivas generará ingentes costos sociales. Reducir los riesgos del embarazo en las adolescentes es una prioridad clara para los países que se esfuerzan por alcanzar los objetivos de Desarrollo del Milenio (OMC).

Esperamos que quien está ahora al frente del Enipla entienda la responsabilidad de involucrarse en este programa con criterios modernos, con base técnico-científica, evitando posiciones fundamentalistas. Un programa de esta envergadura debe liberarse de errores conceptuales, como que la píldora del día después es abortiva o asociar el uso de condón y otros anticonceptivos con pecaminosidad. La Enipla debe liderar sin prejuicios los objetivos para los cuales fue creada y cumplir con el compromiso social del Gobierno de prevenir y solucionar problemas de salud.

El Gobierno debe atender este problema considerando las políticas de salud internacionales; a más de las campañas de educación, debe contemplar la interrupción terapéutica y segura del embarazo, la eugenesia, el diagnóstico prenatal, anticoncepción, esterilización, etc.

Esta problemática tratada con posicionamientos morales y religiosos, que son individuales y privados, ha obstaculizado el diálogo y pone en riesgo programas de salud pública importantes para el desarrollo de un país.

El manejo científico-técnico de la salud pública es la única salida para lograr un cambio de la sociedad en temas de sexualidad y derechos. Un programa estatal debe ser laico y neutro, garantizando sin discriminación el efectivo goce de los derechos establecidos en la Constitución y en los instrumentos internacionales.

Modas científicas

Por: Dr.César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

La ciencia no es inocente ante las modas investigativas; obedece a tendencias, finanzas e intereses ajenos a ella. Un descubrimiento puede marcar toda una era de desarrollo científico. Así el descubrimiento de la totalidad del genoma humano marca el paso en la actualidad científica. Están de moda todos los “omas”: genoma, proteoma, exoma, lipidoma, microbioma, etc. Esto refleja también el avance tecnológico para lograr los omas.

En un análisis sobre las tendencias o modas de los temas científicos, los investigadores Jen Christiansen y Mark Fischetti, en su artículo ‘Los intereses de la ciencia’ aparecido en el último número de la revista Investigación y Ciencia, examinan las modas de la ciencia recogidas en las portadas de esta como de su revista homóloga Científicos Americanos, en circulación desde 1921.

Es interesante ver cómo los movimientos históricos de la sociedad provocan tendencias de investigación. Considerando 15 grandes áreas científicas, se muestra que la Ingeniería declinó en interés desde 1921 hasta 1950 y se ha mantenido con baja presencia, no así la Biología y ciencias afines como la Medicina y las Neurociencias, que son las de mayor crecimiento desde los 50 a la actualidad, algo atrás la Zoología, la Astronomía, la Óptica y la Mecánica Cuántica.

En el tiempo se ha mantenido con interés constante en portada la Antropología, la Arqueología y la Paleontología. Repunta la Evolución humana con sus grandes logros desde el 2010 y sucede lo mismo con la Innovación.

La Agricultura y la Minería curiosamente han tenido esporádico impacto en portadas. Las Matemáticas y la Química se han mantenido en bajo interés, mientras que la Informática tuvo su auge entre 1970 y 2000.

La ciencia se refleje en los intereses de las sociedades y a veces con poca ética. Muchos investigadores critican el supuesto avance de la ciencia vinculada a la inversión en el desarrollo militar. Para algunos, hacer ciencia es invertir en investigaciones en armas químicas y biológicas, tendencia repetida en las portadas de las revistas científicas, sobre todo de los 40 a los 70. Aún persiste en los robots guerreros, mejoras genéticas en soldados, drones, guerra de las galaxias y más.

La ética cuenta poco al momento de diseñar una bala más penetrante o manipular virus para exterminios. Incluso los investigadores sucumben ante el poder financiero y suelen justificarse aduciendo que solo son investigaciones. Si el mundo científico y el poder político se unieran en beneficio de la humanidad, se encontrarían mejores herramientas para el bienestar y la paz.

Venenos o medicamentos

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

Medicamento es “un veneno que, en dosis adecuada, cura”. Esto significa que todo fármaco mal usado puede dañar a una persona. La respuesta a un medicamento es determinada genéticamente, hay personas que responden mejor o peor al mismo medicamento, por lo que su uso debe ser controlado.

En su reciente libro Medicamentos que matan y crimen organizado, el danés Peter Gotzsche llama la atención sobre la producción y negocio de los medicamentos. El autor asevera que los medicamentos producen 200 mil muertes por año en Europa y que los fabricantes han ocultado esa información para continuar con el gran negocio que representa su venta. El autor afirma que la industria de medicamentos es el tercer mejor negocio del mundo; luego de las armas y del negocio ilícito de las drogas.

El libro sostiene que los fabricantes de medicamentos, al manejar el 95% de la promoción de sus productos, puerta a puerta, entre médicos y personal de salud, tienen ‘comprado’ a este personal que incluye a las autoridades que toman las decisiones sobre los tipos de medicamentos que circulan en los países. Ocultan, además, que los medicamentos son la tercera causa de muerte en el mundo, luego de los problemas cardiovasculares y el cáncer.

El autor, farmacólogo, afirma que los productores de medicamentos “extorsionan, cometen fraude, violan la legislación y mienten” y que “no trabajan para mejorar la salud, sino para obtener los máximos beneficios”. Denuncia que, para este fin, se han inventado enfermedades farmacocurables, como la ansiedad, angustia, déficits de atención, así como toda una gama de problemas de deficiencias vitamínicas, con reconstituyentes de salud, mejoradores de actividad física y mental, entre otros, que no han mostrado eficacia. Al tiempo que poco se gasta investigando el fármaco ‘ideal’.

Esta misma visión tiene el farmacólogo belga Bernard Bégaud, quien declaró que “los efectos secundarios de los medicamentos causan más muertes al año que las producidas por accidentes de tráfico y suicidios, juntos”, esto dentro del juicio al laboratorio Servier al que se le acusa de que su medicamento contra la diabetes (Mediator) produjo más de mil muertes.

Del mercado, solo el 33% de medicamentos es realmente útil, por lo que las sociedades deberían cambiar la percepción jurídica del medicamento y los individuos deben apuntar a consumir solo los prescritos por profesionales y evitar la autorreceta; las autoridades deben endurecer los controles, mostrar los datos reales investigativos y evaluar las propagandas engañosas sobre medicamentos.

Philae, Curiosity y el origen de la vida

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

Han despertado mucho interés los datos enviados por dos robots espaciales, Philae desde el cometa 67P y Curiosity desde Marte. Ambos tienen como objetivo detectar moléculas que expliquen el origen de la vida.

Existen tres teorías sobre el origen de la vida en la Tierra: una no científica que es el creacionismo apoyada de manera sutil por pseudociencias que han reemplazado un creador por un diseñador inteligente. Otra denominada Panspermia que plantea que ella vino desde el espacio en cometas, asteroides o meteoritos; bajo esta visión, organismos completos y complejos se implantaron en nuestro planeta. El postulado más refinado dice que las condiciones primitivas del planeta permitieron la evolución hasta las especies actuales; el problema de esta teoría es que no explica el origen de esa vida extraterrestre, solo la ubica sobre la Tierra.

Para explicar científicamente el origen de la vida, los estudios de cometas, meteoritos y asteroides, son importantísimos porque estos guardan las condiciones iniciales del origen del universo: gases congelados, productos orgánicos e inorgánicos en estados incluso no conocidos.
Encontrar restos o rasgos de vida fuera de la Tierra apoyarían la exogénesis que sostiene que las condiciones del espacio exterior permitirían originar vida a partir de los materiales inorgánicos existentes, y la abiogénesis que explicaría de forma similar el paso de lo inorgánico hacia lo orgánico en la Tierra.

Los datos de Philae y Curiosity muestran productos orgánicos. En Marte, Curiosity encontró clorometano, propio de compuestos orgánicos de carbono, hidrógeno y oxígeno, que son los compuestos vitales básicos. Philae igual los encontró y se guarda la esperanza de que encuentre agua en 67P que, directa o indirectamente, es la base de la vida en la forma que conocemos.

La vida en la Tierra se originó en el agua, y esta pudo haber llegado en grandes cantidades, traída por miles de meteoritos y cometas que chocaron contra esta. Descubrir agua en otros cuerpos del espacio, se convierte, entonces, en un reto de astrónomos y geofísicos porque daría explicación de la base de la vida.

Lo que importa es comprender filosófica y científicamente cómo se origina la vida, no solo de dónde viene. Las investigaciones actuales apuntan a entender la vida fundamentada en la materia, a comprender los seres que tienen ADN, que nacen y se reproducen; a vislumbrar las condiciones químicas para que la vida se dé, se mantenga y evolucione como las ciencias la entienden ahora y la descifrarán cada vez más hasta su esencia.

El Congreso Ecuatoriano de Genética Humana

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

La Sociedad Ecuatoriana de Genética Humana (SEGH), fundada en 1989 por los primeros cinco médicos genetistas del país y algunos amigos de la genética, tiene entre sus funciones y metas difundir el desarrollo de la genética, no solo médica sino de algo más amplio como es la genética humana, y para ello organiza charlas, seminarios, cursos, auspicia encuentros científicos y realiza el Congreso bianual, que es su evento más relevante.

Por muchos años la SEGH estuvo aletargada, pero con su reactivación llegamos al IV Congreso Ecuatoriano, realizado en esta ocasión en Guayaquil, del 22 al 24 de octubre pasado, con la participación de profesores nacionales y extranjeros.

Allí constatamos que los genetistas nacionales han hecho grandes esfuerzos por dar forma y mantener la actividad científica y de asistencia en salud genética en las instituciones que trabajan. Hemos avanzado, pero la brecha tecnológica con los países de la región y con los del mundo es grande.

Se mostraron investigaciones en enfermedades raras, fibrosis quística del páncreas, psoriasis, trastornos de la diferenciación de sexos, cáncer, acciones de nuevos fármacos de acuerdo a la constitución genética de las personas o poblaciones, bioinformática, protocolos de diagnóstico y tratamientos, desafíos de la genómica y sus beneficios en la llamada medicina personalizada.

Hace falta en el país centros de genética. No hay suficientes especialistas en esta rama moderna y apasionante. La OMS recomienda un genetista por 100 mil habitantes; esto significa que Ecuador debería contar con 130 y apenas llegan a 15, y no existe el personal necesario para pruebas especiales de laboratorio.

Debemos crecer para servir a la población. Quizá la Maestría en Genética Humana y Molecular que abrirá la UDLA, en 2015, aporte para superar esta deficiencia. La alta cifra de 30% de ciudadanos con discapacidades por problemas genéticos registrada en el país refleja la urgencia de enfrentarlas.

Hemos madurado como asociación, tenemos mejores recursos, pero de otro lado, las políticas públicas sobre genética médica y humana permanecen solo como proyectos y ofrecimientos. Siempre se anhela que asistan al congreso las autoridades de salud para que, con conocimiento de la realidad nacional sobre los problemas: malformativos, hereditarios, crónicos degenerativos con base molecular y genética, enfermedades huérfanas, etc., tomen las medidas de salud pública idóneas, pero en esta oportunidad no se logró su presencia. Urge que tengamos la atención genética como un derecho de salud de todos.

Primera promoción de médicos

Por: Dr.César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

En julio de 2008 fundamos la Facultad de Medicina de la UDLA con el objetivo de contar con una alternativa educacional con potencialidades diferentes. Nos centramos en la investigación como eje de la formación, así como en la educación basada en la simulación, aprovechando al máximo las herramientas tecnológicas y los avances de la biomédica.

Se crearon dos decanatos: de Docencia y de Investigación. Se instituyó el Instituto de Investigaciones Biomédicas y recientemente el Centro de Investigación Traslacional, que liderarían la investigación unida a la actividad estudiantil. La malla curricular muy analizada se armó y se consensuó que en 12 semestres los estudiantes tendrían las herramientas en ciencias básicas, clínicas, terapéuticas y quirúrgicas, para obtener su título de Doctor en Medicina y Cirugía.

Luego de 6 años, 18 estudiantes terminaron exitosamente su carrera, junto a 120 profesores. Estos años han sido una magnífica experiencia para autocriticarnos, moldearnos y cumplir altos objetivos.
Acceder al sistema de salud fue un reto en acuerdos, oportunidades, fortalezas y debilidades, pero nuestros estudiantes se integraron, y por concursos. Algunos cumplieron importantes metas, ganaron premios, se vincularon con el trabajo de salud en comunidades y entendieron así las demandas intensas de la vida médica.

Formamos médicos competentes y competitivos, con sólida ética, que con seguridad serán líderes en sus nuevos desafíos. Les enseñamos que el médico tiene un poder especial orientado al bien público: a curar, en su más amplio sentido. Para hacerlo deben manejar los conceptos científicos, fundamentar la acción en el pensamiento racional, tomar el mejor camino que la evidencia científica marque, estudiar profunda y críticamente los adelantos médicos, ser individuos generadores de transformaciones del sistema de salud.

Aspiramos desde el inicio a que los médicos que formaríamos debían encaminarse hacia las especialidades necesarias para el Ecuador y acordes a las exigencias mundiales. Partimos de que el conocimiento es tan amplio, que ser un generalista será perderse de un apasionante campo de conocimiento científico profundo. Las demandas nacionales de especialistas han crecido, los hospitales los requieren y los pacientes los necesitan.

Nuestros médicos saben interrelacionarse con los pacientes, diagnosticar con precisión, usar los métodos modernos de apoyo diagnóstico y tratar de la mejor manera posible, para preservar la salud bio-psico-social de un individuo. Todo apunta a que lo hicimos bien.

Los desafíos de Ikiam

Por: Dr. César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

Hace unas semanas se inició el curso de nivelación de la Universidad Regional Amazónica Ikiam, como otro de los pilares, retos y desafíos de la universidad ecuatoriana. Incrustada en la tradicionalmente olvidada Amazonía ecuatoriana, su presencia genera expectativas.

Ikiam es una importante opción de estudio para la población del Oriente del país. Rodeada de selva, se convierte en un laboratorio natural, concebida como universidad para investigar ciencias naturales, bioconocimiento y la megadiversidad local que, de paso, es extremadamente atractiva para investigadores foráneos.

Las cosas no son fáciles en un laboratorio natural. La universidad deberá contar con instalaciones modernas y cómodas para estudiantes, profesores y administrativos; plantas de luz, aire acondicionado, energía constante, cuartos de almacenaje, cuartos fríos, laboratorios sofisticados con equipos de punta que permitan estudiar la megadiversidad de manera rápida.

Ikiam se enfrentará a los desafíos de la burocracia ecuatoriana: permisos de importación de insumos y caros, condicionamientos de los proveedores internacionales, trámites del Consep. Sus investigadores, con títulos académicos y profesionales altos, deberán sacar permisos de investigación en los ministerios correspondientes de Ambiente, Salud u otro, comité de ética, cumplir las normas de investigación con animales y plantas, recolectar especies y dejar una en las instituciones de control y repositorio nacional, tener buenos bioterios y más.

Lo clave será establecer convenios de investigación internacional de iguales a iguales, caso contrario, seremos unos simples surtidores de especies exóticas y datos curiosos para fama y aprovechamiento de otros.

Para estudiar biodiversidad en forma seria y moderna, deberemos contar con investigadores en genética avanzada, genómica, exómica y farmacogenómica. Profesionales que evalúen extractos de plantas o de animales, bioinformáticos que simulen en computador los beneficios de las nuevas sustancias, y se deberá contar con sintetizadores químicos avanzados para producir sustancias.

Ikiam deberá tener secuenciadores masivos de ADN, trabajar con expresión de genes, tipificación de animales y plantas, taxonomistas, bioestadísticos. Y es indispensable que la universidad cuente con un departamento de expertos en patentes que garantice la propiedad local de lo que se descubra.

Confiemos que lo mencionado esté en la planificación y que los frutos de esta gigante inversión de todos los ciudadanos den el rédito que esperamos.

Darwin, Galápagos y la evolución

Por: Dr.César Paz y Miño
Científico e Investigador de la UDLA

Hace 179 años, entre el 15 de septiembre y el 20 de octubre de 1835, permaneció en las Galápagos el navío HMS Beagle en el que viajaba el joven naturista Charles Darwin. Un tanto desilusionado al inicio por lo desértico del lugar, fue fascinándose por la variada fauna y flora de las 4 exóticas islas que visitó a lo largo de 2 de las 5 semanas que la nave recorrió la zona.

Las Galápagos se convierten en un ícono mundial el momento que en estas islas volcánicas, geológicamente complejas, con un clima sui géneris por su ubicación en la línea ecuatorial, concentran una fauna y flora tan variada y con comportamiento tan especial, que sirven a Darwin para sustentar en muchos aspectos su más grande postulado: la Teoría de la Evolución de las Especies.

Esta teoría es impactante en la historia del pensamiento científico mundial, pero también en el filosófico. Los postulados evolutivos, magistralmente expuestos por Darwin, revolucionan la manera de ver la vida, cuestionan la creación y las creencias religiosas, y fundamentan todas las ciencias que toman la evolución como la esencia de la organización de la materia y del propio universo. La evolución está en todo; es la base de lo que somos.

Darwin tardó años en analizar los innumerables datos de su teoría. Le llamó la atención que familias de animales, pese a ser similares, constituían diferentes especies. Esta observación cuestionaba la visión fijista de la existencia de las especies, que postulaba que no se habían producido cambios desde su aparecimiento. Galápagos era la evidencia de lo contrario. Las especies cambiaban y evolucionaban en el tiempo, pasando incluso de una menos adaptada a otra mejor adaptada. De esta misma manera, Darwin explicó incluso el Origen del Hombre.

El libro ‘El Origen de las Especies’ apareció en 1859 y recoge las comparaciones y datos que hizo Darwin en las Galápagos. La estación científica Charles Darwin, fundada en la Isla Santa Cruz en Puerto Ayora, constituye un homenaje al científico y a las propias Islas Encantadas.

La Teoría de la Evolución ha sido enriquecida constantemente por aportes de todas las ciencias, una de ellas la Genética que dio el sustento material de la herencia y con sus leyes explica la transmisión de caracteres en las generaciones, lo que apoya con lógica la selección natural. Las dos juntas, Evolución y Genética, conforman la Teoría Sintética de la Evolución que resume todos los fundamentos modernos que convierten a los postulados darwinianos en paradigmas científicos.