Por: Fernando Naranjo-Villacís
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Desde hace 23 años se realiza en la hermosa Cuba un evento que en el mundo de la cultura se conoce como “FIESTA DE LA PALABRA” que es como se denomina a la Feria Internacional del Libro, que allí es itinerante y cubre toda la extensión de la Isla. Este año, Ecuador fue el País al que se rindió homenaje desde el 13 de Febrero al 9 de Marzo, abriéndola en La Habana y clausurándola en Santiago de Cuba.
Esta especial circunstancia permitió que estuvieran presentes 40 escritores nuestros; entre ellos, Justino Cornejo, cuya invaluable obra literaria se resume en 52 volúmenes de los cuales 18 han sido publicados post-mortem, dentro de un programa de rescate, edición y difusión que inició su hija Marigloria hace 25 años. Por eso es que, dada la importancia de sus trabajos, su legado vive aunque falleció en 1988.
Y es tan cierta esta afirmación que el Instituto Cubano del Libro y Editorial Matanzas solicitaron una obra inédita para editarla y presentarla en Cuba en el marco de este regio acontecimiento literario. El pedido no se hizo esperar y Marigloria Cornejo respondió de inmediato con una colección de ensayos sobre literatura hispanoamericana que conforman un hermoso libro de 206 páginas y cuya selección fue hecha por ella conjuntamente con un connotado poeta y crítico literario cubano, el Dr. Virgilio López Lemus, a cuya autoría corresponde el prólogo.
Dados estos antecedentes, el Ministerio de Cultura del Ecuador incorporó a Justino Cornejo, entre los autores nacionales que hicieron presencia en la Feria concediendo a la Ab. Cornejo -entre otros participantes- la calidad de Embajadora Cultural ante la Feria.
En este evento se presentaron 10.000 libros, se cumplieron más de 100 actividades. Además de la participación de grupos musicales, artes escénicas y audiovisuales, así como artes plásticas, fotografía, artesanías y gastronomía.
La obra de Cornejo fue presentada en La Habana, en el Pabellón de Ecuador y en el Museo de Junco en Matanzas, la Atenas de Cuba, en donde por resolución de las autoridades de cultura se acaba de crear el Fondo Bibliográfico Justino Cornejo, decisión que honra no sólo al autor y a su hija, sino a las Letras Nacionales que tienen en Cornejo a un valioso exponente de la Lengua y el Folclore cuyos trabajos serán allá -a partir de ahora- materia de estudio e investigación.
YO, EL LIBRO
En los recintos feriales se expuso un documental de la vida del autor y se distribuyeron gratuitamente dos publicaciones: una con la SEMBLANZA DE JUSTINO CORNEJO, escrita por su hija y un hermoso opúsculo que el autor escribió en 1972 con ocasión de la declaratoria del Año Internacional del Libro decretada por la UNESCO, y que se titula YO, EL LIBRO. La obra a la que nos referimos se titula LA PLUMA QUE NO MUERE De Nuestra América Literaria, que también será presentada en Guayaquil, Quito y Cuenca, con una re-edición ecuatoriana que ya está en marcha y a través de cuyas páginas tendremos un reencuentro con el amigo, con el Maestro, con el periodista, con el Académico de la Lengua, con el folclorista; en suma con un hombre de letras a tiempo completo que nunca dejó de poner contenido a esa sentenciosa frase del Apóstol Martí que nos enseñó que: “Saber leer es saber andar. Saber escribir es saber ascender”.
Además, Marigloria Cornejo hizo contactos con relevantes figuras de la cultura y la política del hermano País; entre ellas los poetas Virgilio López Lemus y Alfredo Zaldívar, la Ms. Zuleica Romay Guerra, Presidenta del Instituto Cubano del Libro y la Dra. Aleida Guevara, hija del Dr. Ernesto (Che) Guevara, y el poeta brasileño Eduardo Degrazia. Y en la apertura de la Feria en la ciudad de Matanzas, al pronunciar el discurso de orden que pidió que hiciera el Instituto Cubano del Libro, Marigloria Cornejo reiteró sus deseos para que continúe el milagro por el que Cuba sigue siendo un país de lectores en un mundo en que hay tantos y tantos elementos que atentan contra el libro y la lectura para que la Perla de las Antillas se mantenga como Faro de Luz en la Cultura de América.
Mi recordado y apreciado profesor Justino Cornejo Vizcaíno, escritor, lingüista, folclorista, maestro de maestros, académico de la Lengua, periodista y, sobre todo, ciudadano universal; recibió en Cuba, merecido homenaje post-mortem en la Fiesta de la Palabra, con la edición de sus obras y la creación del Fondo Bibliográfico identificado con su ilustre nombre.
A partir de la izq. Vemos a los poetas Christian Avecillas (Ecuador), Marigloria Cornejo Cousin (Ecuador), Virgilio López Lemus (Cuba), Dra. Zuleica Romay, Presidenta del Instituto Cubano del Libro y José Eduardo Degrazia (Brasil).
