Por: Dr. Luis Rivadeneira Játiva
Una sociedad no solo requiere de profesionales sino de personas que tengan oficios y de artesanos como, los de San Antonio de Ibarra, que elaboran muebles de madera. Las universidades forman los profesionales y las Escuelas de Artes Oficios, forman en diferentes saberes a los técnicos y artesanos, a saber: carpinteros, ebanistas, talabarteros, sastres, plomeros, electricistas, pintores, peluqueros, zapateros, maestros residentes de obras, entre otros oficios. Hay oficios que van desapareciendo, como los de: arrieros y tamberos.
En cuanto a remuneraciones, en muchos casos, los plomeros ganan más que los Ingenieros. En el caso de nuestra familia, el presupuesto mayor de gastos para el mantenimiento de la casa está en los plomeros, electricistas y jardineros, en forma permanente, porque solo para construir la casa se contrató a un Ingeniero Civil.
Qué bueno, entonces, recordar la historia de la famosa Escuela Quiteña de Artes y Oficios: “Tuvo su origen en la escuela de Artes y Oficios «San Juan Evangelista», fundada en 1551 por los sacerdotes franciscanos Fray Jodoco Ricke y Fray Pedro Gocial, que posteriormente fue el colegio “San Andrés”. Allí se formaron los primeros artistas y artesanos de la época.
En el ámbito artístico se destacó el aprendizaje de la pintura y escultura que fueron más adelante muy bien desarrollados hasta alcanzar fama mundial. Su periodo de producción artística comprende entre los siglos XVI y XIX, siendo considerado el siglo XVIII como el “Siglo de Oro” debido a la alta calidad de obras producidas así como el aparecimiento de talentosos artistas.
Quito fue el principal centro de producción de imaginería hispana, donde se representaron los Misterios de Jesucristo, crucifijos, nacimientos y las distintas advocaciones de la Virgen María y sus misterios, tal es el caso de asunciones y dolorosas entre las más comunes”. (Historia de la Escuela Quiteña de Artes y Oficios 551).
Esta Escuela Quiteña, de mucha historia, debería volver a funcionar, en homenaje a los sacerdotes franciscanos fundadores y a la sociedad quiteña que requiere de maestros de obras, formados de la mejor manera. En la Casa 989 de La Ronda es posible hacer un viaje por la historia artística de Quito a través de cuatro talleres en los que es posible ver, apreciar, descubrir y adquirir productos elaborados con la técnica de taracea, esculturas de madera, luthería, forja artística y talla en madera, propias de la Escuela Quiteña.
Liceo Artístico Daniel Reyes.- En 1944, Gilberto Almeida, al fundarse el Liceo Artístico “Daniel Reyes” en su pueblo natal y debido a sus actitudes artísticas, ingresa en él, cumpliendo con los seis años de estudio. También se formó en esta Escuela el pintor José Bastidas. Su obra: “Cromáticas de la Vida”, (Octubre, 2013), incluye 40 obras de surrealismo mágico pintadas al óleo.
Los imbabureños: Oliverio Corrales Rivera y Edison Ruiz Segovia, artistas plásticos anteños, son formados en la Escuela “Daniel Reyes”, de San Antonio de Ibarra.
En conclusión, la sociedad ecuatoriana no solo requiere de universidades sino de Escuelas de Artes y Oficios, porque se está dando el caso de profesionales que no encuentran trabajo y son taxistas o tienen tiendas en los barrios, porque se ha agotado el trabajo para las profesiones tradicionales. Se requiere, ahora, de nuevos profesionales, en la era digital y de la informática, en la cual el Diario “Hoy” será digital, con una publicación física en forma semanal.