Por: Wilson Zapata Bustamante
Autorizados expertos señalan que el acelerado desarrollo de la economía china ofrece cinco importantes oportunidades.
Primero, el crecimiento del mercado chino ha creado un nuevo espacio de desarrollo para el aumento de la economía mundial. China, que en los últimos años ha puesto énfasis en el impulso de la reforma en favor de la mercantilización, y con ello ha acelerado obviamente el proceso de integración del comercio interior y el exterior y ha regulado en mayor grado el orden en el mercado, está formando con rapidez un gran mercado nacional unificado y está convirtiéndose en un gran mercado emergente con potencial capacidad en el globo terrestre.
En China se ha creado la red de telefonía con el mayor número de usuarios en el mundo y tan solo en el 2003 se incrementaron 110 millones de abonados. En el mismo año la venta de vehículos motorizados llegó a 4,4 millones de unidades, con un crecimiento de 34% sobre el año anterior, y la producción y la venta en un año aumentaron en más de un millón de unidades, fenómeno rara vez visto en la historia de la industria automotriz en el mundo. Una demanda de mercado tan activa no solo respalda el desarrollo veloz de la economía china, sino que también constituye una importante fuerza motriz para la expansión económica mundial.
Segundo, el rápido aumento de las importaciones chinas genera enormes oportunidades comerciales para las fábricas y negocios de otros países. Durante tres décadas de reforma y apertura, las importaciones chinas se incrementaron anualmente en más del 15% por término medio. El volumen de las importaciones de 2003 llegó a 412.800 millones de dólares norteamericanos, con aumento de 117.600 millones, que representaron más de un tercio del volumen total de aumento de las importaciones mundiales. Del 2001 al 2003, China compró mercancías extranjeras por un valor de cerca de un billón de dólares. El responsable del Ministerio de Comercio pronosticó en 2003 que las importaciones anuales de China sobrepasarían un billón desde el año 2020. Son numerosos los negocios y fábricas extranjeras que han obtenido beneficios efectivos para la expansión continua de la demanda importadora de China.
Tercero, el crecimiento acelerado de la economía china ha promovido la reactivación de la economía mundial. Si bien el volumen total de la economía china no es suficientemente enorme para influir en el patrón de la economía mundial, el crecimiento sostenido y acelerado de la economía china, como lo predice un economista internacional, emite un mensaje de reactivación global. El aumento sostenido y rápido de la economía china en los últimos años también ha añadido brillo a la economía mundial. Según el informe publicado en Ginebra por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo el 4 de mayo del 2004, EE.UU., Alemania, Gran Bretaña, Francia y China serán las mayores fuentes de fondos extranjeros en el ejercicio financiero 2004-2005. Es la primera vez que un país en vías de desarrollo figura entre las primeras cinco fuentes de fondos extranjeros. Muchos países en vías de desarrollo califican a China como la segunda mayor fuente después de los Estados Unidos de Norteamérica.
Cuarto, el desarrollo económico chino ha generado oportunidades creativas para el desarrollo económico de la región asiática. Según cifras estadísticas, en 2003 las importaciones chinas desde Japón, la República de Corea y la ANSEA se acrecentaron en más del 30%, pasando a ser importante mercado para que crezcan las exportaciones de esos países. China se ha convertido en el segundo mayor mercado de exportación japonesa y en el mayor país importador de las mercancías surcoreanas.
Quinto, el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio ha creado un favorable ambiente de desarrollo para las compañías transnacionales. El notable mejoramiento del ambiente de inversión ha reforzado la confianza de los inversionistas extranjeros y por ello esas compañías han incrementado una tras otra sus inversiones en China. De las 500 empresas más poderosas del mundo, más de 400 han hecho inversiones en China. Desde 1978 hasta finales de marzo de 2004, China ha hecho uso práctico de inversiones directas extranjeras por una suma acumulada de 513.800 millones de dólares. Las industrias de nueva y alta tecnología con tecnología informática y de comunicaciones como sus exponentes, el sector de servicios y el sector automotriz se han convertido ahora en nuevos focos candentes para las inversiones extranjeras. Las más importantes empresas automotrices según la clasificación mundial, todas han llegado a invertir en China y lo mismo han hecho más del 90 de las 100 más poderosas en tecnología informática mundial. Las operaciones de la aplastante mayoría de empresas con inversiones extranjeras son muy exitosas en China y han rendido grandes utilidades. Para ellas ganarse el mercado chino significa haber alcanzado una nueva competitividad global.
En vísperas del 1º de Mayo de 2004, el responsable del Ministerio de Comercio indicó: Persistiendo en el concepto científico de desarrollo, China otorgará mayor importancia a la coordinación entre los mercados nacional e internacional y participará en mayor magnitud, en una esfera más amplia y a niveles más elevados en la competencia y la cooperación internacionales en lo económico y tecnológico. Al mismo tiempo, seguirá considerando la expansión de la demanda interna como el punto de apoyo fundamental y como una orientación estratégica de largo alcance en el desarrollo económico, y existe inmenso espacio para esta expansión. Además perfeccionará sin cesar la política de consumo y mejorará el ambiente de consumo, a fin de crear nuevos focos de aumento de consumo. Extenderá de continuo la cooperación con el extranjero en ciencia y tecnología, en cultura y educación y será paulatinamente uno de los países que desarrollen con mayor rapidez el turismo en el mundo. Todo esto empujará con energía el aumento del comercio de servicios en el mundo.
Los hechos han demostrado y seguirán comprobando que el desarrollo pacífico de China no constituye amenaza para ningún país, sino que ofrece oportunidades nada fáciles de conseguir. La “teoría de la amenaza de China”, con la que gente con “anteojos de color” especuló algún tiempo, está siendo sustituida por la “teoría de las oportunidades ofrecidas por China”.
“Extendiendo la vista hacia el futuro, estamos llenos de confianza en el porvenir de China y del mundo entero. China será para siempre una fuerza de paz internacional, nunca procurará hegemonía ni esferas de influencia, y jamás será una superpotencia. El pueblo chino, junto con los demás pueblos del mundo, marcharán adelante, unidos de las manos, en defensa de la paz mundial y en aras de la promoción del desarrollo conjunto”, aseguraron autoridades del gobierno de Beijing, durante los diálogos que mantuvieron con el grupo de periodistas de América Latina que visitamos China, en el mes de septiembre de 2009.