“El ajedrez es una piedra de toque para la inteligencia”
GOETHE
“Este caballero me ha dicho que a veces jugáis al ajedrez: yo estoy loca por este juego; daría mucho dinero para saberlo solamente como mi hijo o como voz. Es el más hermoso y el más racional de todos los juegos; el azar no interviene en él; uno se censura y se aplaude; se tiene la felicidad en la cabeza, yo os aseguro que estaré muy avergonzada y muy humillada, si no llego por lo menos a alcanzar una fuerza mediana. En Pomponne, durante el desgraciado viaje último que hice allí, todo el mundo jugaba al ajedrez: hombres, mujeres, niños…”
Epistolario
MME. DE SEVIGNE
“ Brava comparación –dijo Sancho-, aunque no tan nueva que yo no la haya oído muchas y diversas veces, como aquella del juego del ajedrez que mientras dura el juego cada pieza tiene su particular oficio, y en acabándose el juego todas se mezclan, juntas y barajan y dan con ellas en un bolso, que es como dar con la vida en la sepultura”.
El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha
MIGUEL DE CERVANTES Y SAAVEDRA
“Y era el misterio que el amo tenía grande entendimiento, con el cual alcanzaba las delicadezas de Escoto y de Santo Tomás, y era falto de aquella diferencia de imaginativa con que se juega al ajedrez, y el mozo tenía ruin entendimiento y memoria y muy delicada imaginación”.
Examen de Ingenios
JUAN DE HUARTE
“Tomó el negocio a su cargo, y comenzó desde aquel punto a entablar el juego, dando trazas como el que propone dar en el ajedrez un mate a tantos lances en casa señalada”
Guzmán de Alfarache
MATEO ALEMÁN
“En mi necia vanidad, llegué a jugar cuatro partidas simultáneas, defendidas por sendos campeones, amén de numerosos mirones que discutían prolijamente las consecuencias de cada jugada. Partida hubo que duró dos o tres días. En mi empeño de lucirme a toda costa, y confiando en mi pasadera memoria visual, llegué a jugar sin mirar al tablero. Adquirí libros del aristocrático recreo y hasta caí en la inocencia de enviar a las ilustraciones extranjeras soluciones de problemas. Arrastrado por la creciente pasión, mis sueños eran interrumpidos por ensueños y pesadillas, en las cuales armaban frenética zarabanda peones, caballos, reinas y alfiles.
Recuerdos de mi vida
SANTIAGO RAMÓN Y CAJAL
“No; no es esa sociedad la que debemos promover, sino otra más íntima, más espiritual, más comunicativa. Es comunión, comunión de ideas y sentimiento, no sociabilidad lo que nos hace falta. Un club ajedrecista es lo más opuesto a una iglesia cualquiera, a un centro de comunión espiritual. El ajedrez puede llegar a ser uno de los medios de juntarse las personas sin comprometer, en esta junta, sus almas”.
Contra Esto y Aquello
MIGUEL DE UNAMUNO
“El ajedrez es importante. Es una gimnasia mental, es un juego noble y un impar vehículo de prestigio”.
Breve viaje en torno al Ajedrez
JOSÉ MARÍA GIRONELLA
“La lluvia jugaba su partida con las ranas a guisa de piezas de ajedrez y ellas verdes y amarillas, como barnizadas saltaban sobre las casillas negras del jardín”.
Historia de la Princesa Vasavadata-Hudayana
“Concluyó diciendo que si los grados de destreza en el jugar correspondiesen a los de entendimiento, los grandes jugadores de ajedrez serían los mayores ingenios del mundo”.
Cartas eruditas y curiosas
J. FEIJOO
“Es un pensamiento que no conduce a ninguna parte, una matemática que no establece nada, un arte que no deja tras de sí obra alguna, una arquitectura sin materia, y a pesar de ello el ajedrez ha demostrado ser más duradero, a su manera que los libros o cualquier otra clase de monumento. Este juego único pertenece a todos los pueblos y a todas las épocas, y nadie puede saber de él, qué divinidad la regaló a la Tierra para matar el tedio, aguzar el espíritu y estimular el alma”.
El jugador de Ajedrez
STEFAN ZWEIG
El Premio Nobel de Literatura Elías Canetti escribió en 1935 la novela Auto da fe, en la cual el protagonista es un hombre llamado Fischer que quiere ser campeón del mundo de ajedrez. El auténtico Bobby Fischer nació en 1943 (8 años después de ser escrita la novela) y se proclamó Campeón del Mundo de ajedrez en 1972.
Premonición de Elías Canetti
El ajedrez es la vida en miniatura. El ajedrez es lucha, es desafío. Si usted tiene una teoría que probar, si usted piensa que tiene mejor posición, que es muy fuerte, juegue ajedrez. ¡Es mucho mejor que pelear realmente!
Garry Kaspàrov
EX CAMPEÒN DEL MUNDO
Para ser un gran ajedrecista, la pasión y el talento por sí solos no bastan para lograr el éxito. Se necesita un trabajo diario, firmemente orientado y observar esto en la juventud es bastante difícil. Además, hay que aspirar a hacerse persona cuanto antes, es decir, tener iniciativa propia, ser una persona capaz de tomar decisiones audaces, pero justas. Para esto es importante sobre todo educar en uno mismo el sentido de la objetividad, la disciplina, la auto-organización espiritual. Desde la más temprana edad, sin que los mayores te tengan que empujar, aprender a organizar tu vida, compaginando razonablemente el trabajo constante con el descanso necesario y útil.
Anatoly Kárpov
EX CAMPEON DEL MUNDO
“Hay que tener lástima de los hombres que no juegan ajedrez, porque el ajedrez, como el amor y la música, tiene la virtud de hacer feliz al hombre”
Tarrasch
“Si el ajedrez es lucha, el mejor es Lasker; si el ajedrez es ciencia, el mejor es Capablanca; si el ajedrez es arte, el mejor es Alekhine”
Tartakower
El ajedrez es algo más que un simple juego de historia milenaria, es una diversión intelectual que tiene algo de arte y mucho de ciencia. Le permite al hombre aprender a pensar, a razonar, a reflexionar sobre la información que recibe para interpretarla y transformarla. Promueve la independencia congnoscitiva, que se manifiesta en un proceso mental activo en la búsqueda de soluciones personales. Influye en la formación de valores, en el desarrollo del talento lo que facilita aplicar las ideas, en diversas circunstancias…
José de Jesús López González.