
Poeta, Cuenca (Ecuador)
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Por los pasos dados
Por las palabras elementales que vomitamos
Por la cadena de interrogantes que forjamos
Estamos cercados por nuestra piel y sus espejos
Por las naves grises de la memoria
Por el contorno del vacío en que caemos
Por el sonido del golpe y su universal silencio
A veces
parece que al andar pensando nos quedamos en medio de nosotros
O cuando acudimos al grito las palabras pierden sus vocales
A veces parece que nos quedamos solos estando solos
Todo
Todo cuanto me imagino
Todo cuanto fue soñado
Mi inventario
Se me han rato todos los huesos de la memoria
Siempre que intento aprehender al día este anochece
Yo crecí en la caída
Pero hay que caer
Después del último
Una tregua
Y algo más caerá
Dar la mano al hombre
Es como juntar vocales y consonantes
Es intentar un nombre
Dentro de las grandes multitudes
Nos es imposible preguntar
Por el camino que vamos
He logrado
Subirme hasta los hombros
La cabeza
Aún se ve muy distante
La historia la hemos venido escribiendo en el pizarrón de los cuerpos
Hoy por su deteriorado estado nos es ilegible