La Educación Integral de la persona y su relación con la trascendencia es uno de los temas que se tratarán en el Parlamento Universal de la Juventud (PUJ) que reunirá a jóvenes de diferentes países y culturas con el objetivo de construir una civilización que dé respuesta a las más altas aspiraciones del hombre, y que defienda su alta dignidad, poniendo como modelo de unidad y amor a Cristo.
Tras dos años de intenso trabajo, en agosto de 2010, jóvenes de más de 20 países vinculados a este proyecto redactaron y presentaron en la Sede de las Naciones Unidas (Nueva York) una “Carta Magna de valores para una nueva civilización” que expone los valores y compromisos considerados por los jóvenes como fundamentales para construir una nueva civilización basada en el amor.
El ser humano místico
Según Fernando Rielo fundador del PUJ “El Parlamento Universal de la Juventud tiene un supuesto previo: la forma en que se defina al hombre proporciona a éste la medida de su ser y de su actuar. Se deriva de esta definición el fundamento de sus derechos y deberes, de su relación religiosa, social, política y, en última instancia, de su grandeza o de su miseria como ser personal y social.(…) ¿Qué es, entonces, el ser humano? Mi definición es precisa: el hombre es un ser místico. Si místico, su razón, su voluntad y su libertad son tres facultades abiertas a la suma transcendencia. Esta apertura transcendental, que tiene como imperativo absoluto a Dios en virtud de ser Dios “exigencialmente la definición absoluta del hombre”, e imperativo místico al hombre en virtud de ser el hombre “un dios místico inhabitado por el Dios absoluto.”
Profundizar
Justamente, la próxima etapa del PUJ profundizará en las necesidades educativas a fin de lograr vivir los ideales trazados en esta Carta Magna.
El Apartado I de la Carta Magna hace referencia a la Persona humana abierta a la transcendencia definiéndola como un sujeto abierto a un más de sí mismo y abierto a “otros” relacionado siempre con amor que le trasciende, define y construye.
El amor del hombre a Dios y la auténtica vivencia espiritual han sido motivo de desarrollo de la civilización con repercusiones positivas en la cultura y en la vida social. El verdadero amor del hombre a Dios, como Cristo nos mostró, incluye necesariamente el amor a todas las personas y previene de toda forma de fanatismo y egoísmo.
Vivencia espiritual
Durante el encuentro los jóvenes reflexionarán sobre el compromiso de potenciar y dedicar tiempo al desarrollo de la vivencia espiritual, tanto personal como comunitaria para encontrar el sentido mejor que podríamos dar a nuestros actos y vida, a promover el diálogo y la defensa de la dignidad de la persona, especialmente de los bebés, niños, discapacitados, ancianos, inmigrantes, pobres y a encaminar nuestros pasos hacia una civilización del amor, promoviendo una cultura de vida y no de muerte.
Así mismo fomentarán y profundizarán el diálogo con personas de distintas creencias y culturas a fin de compartir nuestras vivencias y potenciar los puntos que tengamos en común, evitando cualquier forma de fanatismo e ideología que vayan en contra de la integridad de las personas y/o atenten al bien común.
Cristo como modelo de amor
Se resaltará la vivencia auténtica del amor y los valores transcendentes que llevan al hombre a una forma de conducta más generosa, dándole la fuerza necesaria para combatir las injusticias y soportar el sufrimiento que esta lucha implica.
Este apartado invita a los jóvenes a tomar a Cristo como un modelo de amor y generosidad para actuar siempre buscando el máximo bien de todas las personas y aceptando el sacrificio para perdonar, amar al otro por encima de intereses personales.
Información e inscripciones
Para mayor información puedes llamar a la UTPL a Misiones Universitarias al teléfono 072 570275 ext. 2217. Escribir al correo: oficinaecuador@identeyouth.org o también realizar tu inscripción online ingresando a: http://www.wyparliament.org/