Así lo destaca Pabel Muñoz, Secretario Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades). Desde el 2006, afirma, decidimos disputar y cambiar las relaciones de poder en el Ecuador y nuestro proyecto ha triunfado de manera contundente por 10 ocasiones en las urnas. Hemos radicalizado la democracia.
Agrega:» Al inicio de este proceso recuperamos el Estado y lo pusimos al servicio de la ciudadanía. La revalorización de la autoridad pública y las facultades estatales nos han permitido planificar, diseñar política pública, regular, controlar y redistribuir la riqueza”.
“Nuestro estado democrático y popular tiene su partida de nacimiento en la Constitución de Montecristi. Este nuevo pacto social es el mayor legado de la Revolución Ciudadana y se convirtió en el centro de una revolución normativa. Más de 180 leyes se han promulgado en estos 8 años para garantizar derechos, construir el Buen Vivir, consolidar un sistema económico social y solidario, afianzar la soberanía y promover la participación ciudadana”.
“En el ámbito programático, hemos elaborado tres planes nacionales de desarrollo que rompieron con el dogma neoliberal y nos han encaminado al socialismo del Buen Vivir”.
Bajo este marco normativo y programático, enfatiza Pabel Muñoz, “estructuramos la gestión del gobierno teniendo a la erradicación de la pobreza como nuestro principal imperativo político. En efecto, logramos reducir la pobreza nacional por ingresos en 15 puntos porcentuales; subir los niveles de igualdad, medidos por el coeficiente de Gini, en 8 puntos; universalizar la educación básica; multiplicar por 3 las atenciones en el sistema público de salud; garantizar la gratuidad y consolidar la más alta inversión de América Latina en educación superior; ampliar la oferta y calidad de los servicios públicos; visibilizar el trabajo doméstico no remunerado; y aumentar la seguridad social para cerca de un millón y medio de ecuatorianos”.
“Estos son solo una muestra de los logros de nuestro gobierno, los cuales han sido posibles porque hemos puesto el capital al servicio del pueblo y no al contrario”.
“Con decisiones acertadas y buenas políticas nuestra economía ha crecido más que el promedio de América Latina. El país tenía atrasos históricos imperdonables, razón por la cual en estos años llegamos a tener la inversión pública más importante de la región. Inversiones en la construcción de infraestructura vial, educativa, de salud, seguridad, de sectores estratégicos y tecnología; así como la conservación de nuestros patrimonios naturales y culturales, y convertir al Ecuador en potencia turística, entre otros, nos ubican como un referente internacional”.
“Los logros son muchos. Aunque el país ya cambió, sabemos que nos queda mucho por delante y que la meta es hacer irreversibles los cambios basados en el poder popular. El reto es profundizar nuestra Revolución”.