Organizan: La SENESCYT, Ministerio Coordinador de Patrimonio, Ministerio de Relaciones Exteriores, SENPLADES y el PNUD, en el Centro de Convenciones Eugenio Espejo. 

En la ceremonia inaugural intervinieron: Héctor Rodríguez, Subsecretario General de Ciencia, Tecnología e Innovación de la SENESCYT; Diego Zorrilla, Representante Residente del PNUD en el Ecuador; Cristovam Buarque, Senador de la República del Brasil y Presidente de la Comisión Preparatoria Rio+20 del Senado Brasileño, en representación de los ponentes internacionales; y, María Fernanda Espinosa, Ministra Coordinadora de Patrimonio, quien declaró oficialmente inaugurado el Simposio Internacional.

Todos coincidieron en destacar que el simposio se realiza con el propósito de fortalecer la Declaración Universal de los Derechos de la Naturaleza, el rol que puede tener un Tribunal Internacional de Crímenes contra el Futuro de la Humanidad y la pertinencia paradigmática de la noción del Buen Vivir, propuestas presentadas por el Ecuador en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, Río+20.

“Este simposio representa cada una de las acciones que estamos haciendo y que ponen en evidencia que estamos a la vanguardia de un pensamiento político avanzado, con acciones fundamentadas en un cambio de paradigma del extractivismo y de ver a la naturaleza como una fuente de recursos inagotables”, manifestó Héctor Rodríguez, Subsecretario General de Ciencia, Tecnología e Innovación.

La participación de la SENESCYT, enfatizó, está enfocada a fomentar el debate en torno a la construcción de sociedades basadas en el conocimiento, es así que este 11 de octubre, en el panel 7, René Ramírez, Secretario Nacional Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología  e Innovación,  hablará sobre la Sociedad del Bioconocimiento.

El Buen Vivir como alternativa de desarrollo

La Ministra Espinosa destacó el Buen Vivir como una alternativa de desarrollo, que ha tomado como base el crecimiento económico infinito; la Declaración Universal de los Derechos de la Naturaleza; la Nueva Arquitectura Financiera; y, la Cultura como cuarto pilar del desarrollo sostenible.

Enfatizó que la propuesta del Buen Vivir, que se puede entender como vivir en  armonía con la  naturaleza, con uno mismo y con los demás, reconociendo la diversidad cultural, se presenta como una propuesta alternativa al desarrollo. Esta propuesta toma en cuenta los límites de la naturaleza. El Buen Vivir exige transformaciones profundas en los modelos económicos y una transición responsable hacia una economía del conocimiento y de los servicios, la misma que requiere de la movilización de los recursos provenientes de actividades  extractivas.

Dijo que la noción del Buen Vivir sobre la que se construye el Plan Nacional para el Buen Vivir del Ecuador se asienta sobre tres pilares: Promueve, como primer pilar, un modelo económico incluyente, incorporando a los procesos de acumulación y redistribución a “los actores que históricamente han sido excluidos de las lógicas del mercado”. El segundo pilar que plantea el Buen Vivir es “el tránsito del actual antropocentrismo al biopluralismo”, modificando en tal virtud la relación entre los seres  humanos y la naturaleza. El tercer pilar en el que se afirma la noción del Buen Vivir hace alusión a la igualdad, justicia social y a la interculturalidad, considerando que el  Ecuador se define como un Estado plurinacional e intercultural.

Hojas de ruta

Durante dos días, los participantes se plantearán: ¿Cuáles son las vías de acción para un planeta vivible?. Este simposio buscará establecer varias estrategias y hojas de ruta sobre las cuales puedan trabajar los gobiernos y la sociedad civil, con el objetivo de crear un mundo más sostenible.

Espinosa  resaltó que en nuestro país, la discusión sobre el modelo de desarrollo y los límites biofísicos del planeta se convirtió en un tema fundamental cuando asumió el gobierno el Presidente Rafael Correa en el año 2007, y particularmente durante la elaboración de la nueva Constitución, aprobada por voto popular en el año 2008.