La Universidad Nacional de Loja, como institución de derecho público, respeta y cumple con el ordenamiento jurídico del Estado ecuatoriano, por lo tanto acatamos la resolución del CES (Consejo de Educación Superior) y estamos dando las facilidades logísticas y administrativas para que la comisión de intervención pueda cumplir con sus actividades en el ámbito de sus atribuciones y facultades; sin embargo dejamos sentado nuestro absoluto desacuerdo con la medida tomada, expresó el Dr. Gustavo Villacís Rivas, rector de la Universidad Nacional de Loja.
En una rueda de prensa que ofreció en su despacho, en compañía de la Vicerrectora de la institución, Dra. Martha Reyes Coronel; el asesor del Rectorado, Dr. Franco Jaramillo; directores de las Áreas Académico-Administrativas; jefes y Directores departamentales, dio a conocer la posición de la UNL frente al proceso de intervención.
El Dr. Gustavo Villacís Rivas fue enfático en señalar que «no existen causales para la intervención del Alma Mater lojana y tampoco se cumplió el debido proceso, situación que se agrava por la falta de evacuación y sustentación de la prueba de conformidad con la Ley». “Por estas consideraciones acudiremos a las instancias administrativa y judicial; e inclusive de ser necesario, a los organismos internacionales de derecho, en defensa del prestigio y dignidad institucional”, anunció.
El rector dijo que causa preocupación que el grupo político que fuera extraño a la institución, junto a aquellos que perdieron las elecciones, hayan orquestado la intervención a la UNL. “Más penoso aún, es que los grupos violentos que agredieron a la gobernación de Loja, y que en toda tribuna atacan al gobierno nacional, estén ahora unidos para respaldar esta medida que afecta a una de las universidades públicas de mayor ranking nacional, como lo establece el informe de evaluación y acreditación de CEAACES”, acotó.
También señaló que es condenable que al viejo estilo de la politiquería y de la partidocracia pretendan afectar a la institución, al intentar apoderarse del gobierno universitario a través de una medida administrativa, para como en el pasado utilizar a la universidad para promover escenarios políticos partidistas, en beneficio de quienes tienen poco o ningún respaldo popular, burlándose así de la voluntad soberana de la comunidad universitaria.
Finalmente, el rector y su equipo de gobierno expresaron la gratitud a profesores, estudiantes, administrativos y trabajadores, por su lealtad e identidad con el Alma Mater lojana, porque “mientras un grupo minúsculo festejaba la decisión de intervención, mayoritariamente los académicos y estudiantes conscientes, permanecieron en las aulas y en sus sitios de trabajo, laborando responsablemente por el engrandecimiento de la institución”.
El rector también aplaudió la posición adoptada por la ciudadanía lojana, porque condenó desde diferentes espacios la resolución de intervención, por considerarla ofensiva.
El titular de la UNL invitó a los universitarios a mantener la cordura, a obrar con altivez y cordialidad con quienes cumplen las funciones de interventores de la UNL, a proporcionarles la información que requieran, a mostrarles las dependencias, a darles a conocer el trabajo honrado y honesto de maestros, estudiantes y servidores públicos.