Así lo señala el Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo denominado TERCE dado a conocer por la UNESCO en Brasilia, y replicado en toda América Latina este jueves 4 de diciembre de 2014.
El TERCE es el estudio de logro de aprendizaje a gran escala más importante de la región, ya que comprende 15 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay) más el Estado de Nuevo León (México).
El estudio evalúa el desempeño escolar en tercer y sexto grado de escuela primaria en las áreas de Matemática, Lenguaje (lectura y escritura) y, para sexto grado el área de Ciencias Naturales. Su objetivo principal es aportar información para el debate sobre la calidad de la educación en la región así como orientar la toma de decisiones en políticas públicas educativas. Para cumplir con este objetivo, el estudio no solo consiste en la aplicación de pruebas para medir logros de aprendizaje, sino también de cuestionarios para comprender el contexto y entender las circunstancias bajo las cuales el aprendizaje ocurre en las áreas evaluadas.
El piloto del TERCE se aplicó en 2012 y su aplicación definitiva se realizó en 2013. En su implementación, la UNESCO trabajó con los socios implementadores, el Centro de Medición Mide UC de la Pontificia Universidad Católica de Chile y el Centro de Políticas Comparadas de la Universidad Diego Portales (Chile), en la elaboración de instrumentos de investigación y capacitaciones que permitan el desarrollo de capacidades y el uso correcto de los datos.
Los resultados de logro de aprendizaje del TERCE serán comparables con los del Segundo Estudio Regional Comparativo y Explicativo (SERCE), por lo cual se podrá conocer el progreso que los esfuerzos desplegados por los sistemas educativos de la región han logrado en términos de aprendizaje en lenguaje, matemáticas y ciencias en alumnos de primaria respecto de 2006.
Otras innovaciones del TERCE son los “módulos nacionales” de factores asociados, que permitirán a los países estudiar en más detalle factores que coinciden y afectan el aprendizaje; un módulo para estudiar el impacto del uso de las TICs en la calidad educativa; y la relación entre alimentación y aprendizaje.
Logros de aprendizaje
El puntaje promedio regional de logros de aprendizaje mejoró significativamente desde el SERCE en todos los grados y áreas evaluados, especialmente en matemática.
La Oficina de la UNESCO en Quito informó que para analizar los resultados de aprendizaje en lenguaje, matemáticas y ciencias de estudiantes de 3º y 6º grado de primaria en países de América Latina desde 2006, uno de los objetivos del TERCE (Tercer Estudio Regional Comparativo y Explicativo) fue asegurar la comparabilidad con SERCE, su antecesor. Gracias a que todas las áreas, excepto escritura, fueron comparables con el segundo estudio, SERCE, en cuanto a puntuación, el TERCE pudo evaluar si los estudiantes de los países participantes hicieron progreso en términos de logro de aprendizaje, entre 2006 (año de aplicación del SERCE) y el 2013 (año de aplicación del TERCE).
Los resultados de los estudiantes de la mayoría de los países participantes en el TERCE mejoraron significativamente entre el segundo y tercer estudio. Solo en cuatro de los 15 países participantes los estudiantes tienen un puntaje promedio -en algunas de las pruebas y áreas evaluadas- que disminuyó de forma significativa entre 2006 y 2013.
Los avances son alentadores, sin embargo se requieren esfuerzos adicionales para que los países cumplan con sus compromisos para asegurar una educación de calidad para las niñas y niños de la región.
Los resultados muestran que se mantienen desafíos en cuanto a la adquisición de los aprendizajes básicos. No basta con acudir a la escuela; es necesario, además, que los niños aprendan lo necesario mientras están escolarizados. Si los niños no adquieren los conocimientos básicos en la escuela, aumenta el riesgo de abandono escolar, y persisten desventajas que, con el paso del tiempo, se agravarán.
La educación primaria es de central importancia para el Derecho a la Educación entendido como el derecho a aprender a lo largo de la vida. Entendido así, el derecho requiere que la educación sea de calidad.
La Oficina de la UNESCO en Quito puntualizó que aun cuando el promedio nacional de logro de aprendizaje evaluado por pruebas como el TERCE solo representa una dimensión de la calidad educativa, la eficacia, las competencias en lectura, escritura, matemáticas y ciencias son fundamentales por su rol central en lograr alfabetización universal así como en el aprender a aprender, y evaluarlas tiene una importancia capital para la calidad. La UNESCO espera que la información provista por el TERCE sea útil para conocer más sobre los niveles de desempeño de aprendizaje como una de las dimensiones de la calidad educativa la que, junto a las otras (relevancia, pertinencia, equidad, y eficiencia), avancen a favor de la garantía del Derecho a la Educación en la región.
El TERCE es la evaluación del desempeño de los estudiantes más representativa de América Latina, constituyendo una base de datos única. En el TERCE participaron más que 3.200 escuelas y más de 134.000 estudiantes (son cerca de 67.000 por grado). En promedio, por país, participaron unas 250 escuelas y unos 9.000 estudiantes, aproximadamente. La muestra por país varía, tomando en cuenta características de la población, pero es siempre representativa de la población de estudiantes en el país en 3er y 6º grados. Por ello, los resultados obtenidos reflejan, con un alto grado de certeza, el desempeño promedio de las poblaciones de los países.
El TERCE aplica pruebas referidas a elementos comunes de los currículos escolares de la región en matemática, lenguaje y ciencias naturales, lo cual se realiza a través de un análisis curricular. Esto comprendió la revisión, sistematización y análisis de lo que prescriben los diversos currículos en las distintas áreas a evaluar en la región, a fin de establecer dominios conceptuales comunes a los estudiantes de educación primaria de todos los países participantes. En consecuencia, los instrumentos de medición son adaptados al contexto social, cultural y económico de la región.
Para cada grado y área hay 4 niveles de desempeño de los estudiantes. En el Nivel I se agruparon las tareas más fáciles y en el IV, las más difíciles. Como los niveles son inclusivos, los que alcanzan el Nivel IV resuelven los ítems de todos los niveles anteriores.
En general se aprecia una disminución de la proporción de estudiantes que se ubican en los niveles de desempeño más bajos (bajo I y nivel I), y un leve aumento en la proporción de estudiantes que se ubican en los niveles más altos (III y IV); especialmente en el nivel III.
Aun así, los niveles I y II tienden a concentrar más de 50% de los estudiantes de Primaria en la región, tanto en SERCE como en TERCE. En particular, matemática en tercer grado es el área en la cual el porcentaje de estudiantes en nivel IV tuvo un mayor aumento, pasando de 8% a 12%.
Con respecto a diferencias de género, no existe un patrón de comportamiento generalizado a todas las pruebas y grados. En lectura en tercero y sexto grados predominan los países donde las niñas tienen un puntaje promedio más alto que los niños. En matemática en sexto grado, tanto en SERCE como en TERCE las diferencias significativas favorecen a los niños, tanto a nivel regional como en la mayoría de los países. En ciencias, considerando los ocho países participantes con información comparable, se observan diferencias y hay países en los cuales el rendimiento por género se invirtió: mientras que en SERCE se observaron diferencias significativas a favor de los niños, en el TERCE se presentaron a favor de las niñas.
Según la Oficina de la UNESCO en Quito, el aporte del TERCE consiste en mostrar el avance de los resultados de aprendizaje de los estudiantes en los países donde fue aplicado y los factores que explican su éxito o su rezago. A nivel de países, lo central es entender cuáles son las razones de su éxito y, así, generar aprendizajes que sirvan a todos los sistemas educativos. Por tanto, el análisis debe hacerse a nivel del país, ya que si bien existen elementos comunes entre países, la región presenta realidades muy diversas.
Concluye señalando que la UNESCO continuará en estos esfuerzos trabajando en estrecha colaboración con las autoridades nacionales y con todos aquellos que contribuyan al logro de una educación de calidad para todos que avance en la anhelada garantía del Derecho a la Educación en la región.
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